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La competencia desleal de vendedores ambulantes que no pagan impuestos, influyó en las pérdidas de este años de los vendedores de legumbres, frutas, carnes que laboran dentro del mercado público de La Chorrera.  |
Vendedores del Mercado Público de La Chorrera manifestaron que este fin de año "se comieron un cable con las ventas", lo que atribuyen a la competencia desleal de vendedores ambulantes que no pagan impuestos, al desborde aguas negras que hay junto al mercado y la caótica situación económica que vive el país.
El comerciante Armando Pérez indicó que las ventas este año han sido malas porque han tenido muchas restricciones, ya que en su caso, no pudo vender fuegos pirotécnicos, a pesar de haber sacado su permiso con tiempo, al tiempo que señaló que "en los operativos sólo se ataca a los pequeños vendedores y no a los dueños de tiendas y minisuper".
Otra de las personas descontentas, Lucy de Gutiérrez, dijo que en el 2001 resultó muy afectada con las ventas, debido a que además de la crisis económica, el desborde las aguas negras durante casi todo el mes de diciembre, alejó a los clientes del mercado.
Gutiérrez también se quejó de las medidas impuestas por las autoridades municipales, puesto que a ellos que son arrendatarios del mercado les fueron impuestas estrictas medidas de espacio en la calle contigua al mercado que utilizan para el mes de diciembre.
No obstante, aseguró que la Avenida Central "todo el mes de diciembre ha estado abarrotada de vendedores ambulantes que no pagan impuestos". Igualmente, Sergio "Yindo" Guardia, vendedor de gallina de patio, dijo que las ventas este año bajaron casi un 50% en comparación al año anterior, ya que sus jaulas se encuentran llenas de aves, debido a que la gente se va a los supermercados a buscar pollos a 0.72 centavos la libra.
Entre tanto, Romelia de Rivera, administradora del Mercado Público, culpó al tesorero municipal, José Aparicio, de la situación, tras señalar que ella le puso las quejas de los vendedores ambulantes para que mandara los inspectores, pero éste le respondió que buscara a los corregidores. Los vendedores ambulantes, por su parte, indicaron que ellos deben hacerle frente al pago de un impuesto de B/. 10, que calificaron como muy elevado porque no está habiendo mucha actividad. |
