El sábado en la tarde, miles de suspiros se dieron a eso de las 4: 30 p.m. cuando arribó muy puntual al Aeropuerto Internacional de Tocumen, el Príncipe Felipe de Borbón.
Muy elegante, como siempre, el heredero de la corona española, apareció vestido con un saco gris combinado con una elegante corbata en tono verde, atuendo que complementó con unos zapatos chocolates, la verdad lucía muy bien.
El Príncipe visitó nuestro país para instalar El centro logístico de ayuda humanitaria, el cual reducirá hasta en cuarenta horas su capacidad de respuesta ante un potencial desastre en América Latina y fue recibido por el canciller de la República, Samuel Lewis Navarro, quien expresó su admiración por el heredero.
"Es una persona con mucho conocimiento que se adapta a cada país que visita", dijo Lewis.
Hay que destacar que el Príncipe tuvo que esperar al presidente Martín Torrijos, al momento del acto. La verdad fue algo de muy mal gusto, ojalá que al Presidente se le pegue algo de puntualidad de la realeza.