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Las osamentas de 78 campesinos indígenas que fueron asesinadas por miembros del Ejército entre 1980 y 1984, y cuyos restos fueron localizados en el terreno que hasta hace algunos años ocupó un destacamento militar, fueron inhumados ayer en una comunidad ubicada en el noreste del país.
Previo a ser inhumados los restos, familiares de las víctimas en compañía de organizaciones internacionales y activistas humanitarios realizaron ceremonias religiosas, las cuales iniciaron desde el pasado miércoles, explicó a ACAN-EFE una portavoz de la Coordinadora Nacional de Viudas de Guatemala (Conavigua).
Sólo diez de las 78 osamentas localizadas en los cementerios clandestinos por la Asociación de Antropología Forense de Guatemala fueron identificados.
Con la esperanza de que alguno de los restantes 68 cadáveres fuera identificado por sus familiares, Conavigua hizo el viernes en la municipalidad de San José Poaquil, a 70 kilómetros al noreste de la capital, una exposición de la ropa que portaban al momento de ser encontrados.
"Fue muy doloroso, pero por lo menos algunas personas lograron identificar a sus seres queridos gracias a que reconocieron las ropas que llevaban el día en que fueron desaparecidos por el ejército", explicó la fuente.
Mario Rasjal, un joven cuyo padre fue secuestrado por los militares en 1981, recorrió el salón junto a su madre Carmen España. Después de varias vueltas, convencidos a si mismos, aseguraron que el pantalón azul y la camisa roja expuesta sobre una pequeña caja de madera que contenía unos restos humanos, eran los de su padre, Inés Rasjal. "Yo iba con él cuando se lo llevaron, y aunque tenía ocho años, tengo su imagen grabada. Por eso sé que es él", relató Mario a periodistas.
Previo a celebrar una misa y leer un documento en el cual exigieron justicia para sus seres queridos, los familiares de las víctimas las enterraron en el cementerio de la localidad. Esas osamentas, exhumadas el año pasado por la Fundación de Antropología Forense de Guatemala, pertenecen a las más de 50.000 personas que fueron desaparecidas y masacradas por las Fuerzas Armadas. |
