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La Policía Nacional incautó antenoche 144 fusiles AK-47 y 10 fusiles PKM procedentes de Centroamérica, que estaban destinados a grupos rebeldes de Colombia.
El director de la Policía Nacional, Carlos Barés, dijo que las armas ingresaron al país vía marítima hasta la población de Santa Clara, en Coclé, y fueron decomisadas en una operación encubierta realizada en una finca privada, donde no se produjeron detenciones.
Barés dijo que el arsenal tiene relación con el narcotráfico, ya que los intermediarios de guerrilleros y paramilitares pagan con droga las armas que compran en Panamá.
En tanto, el fiscal Rosendo Miranda reveló que se investiga a varios panameños y colombianos. Además dijo que se realizan allanamientos en busca de un segundo cargamento de armas en Coclé.
En la operación policial se incautaron 2 granadas de manos, 404 municiones de PKM, 1,310 municiones de M-16, así como varios accesorios de armas de guerra.
Cabe destacar que el sitio donde se encontró el equipo bélico, estaba cercano a la pista de Río Hato, por lo que la rápida acción policial impidió que estas armas fueran a dar en manos del crimen organizado. |
