No le quiten la máscara. �NO! Esa máscara es su vida. Ayer, no sólo fue el adiós terrenal a un hombre, Danilo Echeverría, sino fue más que eso, el sepelio de un "�dolo".
Muchos panameños se reunieron en la Iglesia de Lourdes, en Carrasquilla, pero sin rudos ni técnicos, sino la familia deportiva, para darle el último tributo al más grande representante de la lucha libre panameña, quien falleció a la edad de 71 años, producto de un cáncer.
Dentro del féretro, "El �dolo", lucía su famosa máscara que nunca perdió en el cuadrilátero. Al culminar la misa, varios luchadores cargaron el féretro para conducirlo hasta su última morada en el Jardín de Paz.