Los Medias Rojas también pueden sacarse su espinita hoy, y hacerlo en el estadio de los Yanquis frente a Clemens, quien tras 13 temporadas en Boston empacó sus pertenencias y se fue.
Hace 17 años, Clemens fue el último lanzador que llevó a los Medias Rojas a una final de la serie mundial, cuando derrotó a los Serafines de California en el séptimo juego.
Pero ahora es un Yanqui, y hay pocas cosas en Boston que sean más odiadas que eso. Para los aficionados de Boston, Clemens es un architraidor.
Si los Medias Rojas ganan hoy, por fin podrían decir que se rompió el maleficio.
Si Boston vence a Clemens en el partido más importante del año, deben estar destinados a ganar la serie mundial por primera vez desde 1918, dos años antes de que vendieran a Babe Ruth a los Yanquis. Desde entonces, 85 años, los Yanquis han ganado 26 campeonatos y los Medias Rojas ninguno. |