Un encuentro intenso, frenético, de mucho roce, pero también de extremadas ganas por demostrar quién es mejor actualmente en materia futbolística, es el que se espera esta noche en el Estadio Nacional Rodney Carew, cuando las selecciones sub-23 de Panamá y Costa Rica se enfrenten en un partido que promete alcanzar el verdadero clímax dada la importancia del mismo.
Panameños y costarricenses disputarán en choques de ida y vuelta el único cupo disponible al octogonal de la CONCACAF que se jugará en marzo en Estados Unidos, por lo que para ambos, este partido constituye el primer gran paso hacia la consecución del objetivo.
El enfrentamiento con el archirrival "tico" intensifica su giro, ya que por un lado los nacionales buscarán ratificar su demostrado avance; mientras los oponentes intentarán frenar y apagar esa ascendente "marejada" panameña que ha hecho crecer la ya existente rivalidad deportiva entre las dos naciones vecinas.
Las dos representaciones volverán a encontrarse 10 días después de que los seleccionados de categoría mayor lo hicieran en un choque que no tuvo nada de amistoso, y que consecuentemente, ha generado aún más expectativas en cuanto a este duelo.