Tuvo sexo en tumba de su hijo para reencarnarlo

Según el ritual, esto permitía recrear el alma del niño muerto en una nueva criatura, concebida con el mismo padre, por transmigración espiritual.

Por: Redacción/Crítica -

La histórica actriz, activista y feminista Maud Gonne, considerada una heroína en la lucha por la independencia en Irlanda, tuvo relaciones sexuales en la tumba de su hijo para que este reencarnara en otro. Se trata de una práctica que para la gente de su época era un ritual efectivo. A pesar de que muchos la admiraban, Gonne estuvo marcada por una tragedia privada, que la envolvió en un profundo dolor que siguió a la muerte de su hijo, de apenas 2 años. En este drama personal, se inspiró un poema inédito del gran poeta irlandés W.B. Yeats. Según las nociones de espiritismo y ocultismo a las que se había vuelto aficionada, ello permitía recrear el alma del niño muerto en una nueva criatura, concebida con el mismo padre, mediante un proceso de metempsicosis o transmigración espiritual. Gonne había tenido a su hijo Georges, producto de su relación amorosa con un político francés de derecha llamado Lucien Millevoye. Tras la separación de ambos, la actriz se vio envuelta con el poeta irlandés W.B. Yeats, con quien tuvo una relación por 50 años. No obstante, a finales de 1893, Gonne retomó el contacto con Lucien Millevoye, de quien se había separado tras la muerte de Georges. Le pidió encontrarse en el cementerio Samois-sur-Seine. La pareja primero entró a la capilla, luego abrió la puerta de metal sobre el suelo que llevaba a la cripta. Descendieron por la escalera de metal, los cinco o seis escalones. Y allí, al lado del cajón de su niño muerto, mantuvieron relaciones sexuales. Si el alma de Georges logró reencarnarse o no es materia de análisis para los metafísicos. Lo cierto es que, en agosto de 1894, Maud Gonne tuvo otro bebé. Una niña esta vez, llamada Iseult. La educó con dedicación, pero la relación entre ambas siempre fue extraña. Años después, Maud se negó a llamarla “hija” en público, presentándola como una prima o pariente. Ya adulta, Iseult tuvo un romance con Ezra Pound y se casó con el controvertido novelista australiano-irlandés (y simpatizante del nazismo) Francis Stuart. Falleció en 1954, un año después que su madre.

Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.