¡El capote salvavidas!

El condón, capote o forrito tiene tanta historia como polvos ha echado gran parte de la humanidad. Antes lo hacían con los intestinos de los animales, algo así como que su escopeta fuera una especie de morcilla viva y ardiente. Desde el siglo 19 cuando se inventó la vulcanización del caucho se fabrican de látex.

Busqué una calculadora e hice un ejercicio a razón de dos polvitos semanales y una vida sexual de 40 años. Al final de esa olimpiada de “mete y saca” usted ha echado cerca de 5 mil talcos. Esas son las posibilidades de tener hijos o que se le pegue una vaina si es un promiscuo que se revuelca con cualquiera y no se pone su capote por preferir la vaina a rejo limpio.

En lo particular me incomoda el condón…es como si me estuviera ahorcando, pero eso puede ser la diferencia de que te peguen las 4 letras, que llenan de terror a cualquiera.

Y es el que SIDA pone a temblar a cualquiera. En la década del 90, un reportero que cubría junto conmigo el área judicial y que le gustaba andar con chicas que ejercen el oficio más viejo del mundo, estaba bajando de peso de manera acelerada.

Se fue hacer una prueba de VIH que demoró como una semana para que le entregaran el resultado. El hombre tenía la angustia del desesperado. Cuando viajaba en el mismo taxi conmigo y con Justino González, este le empezaba a decir: ¡Se va, se va…pero déjame ese reloj de recuerdo! ¡No jueguen así!, era su tímida respuesta.

El día que fue a buscar los resultados, la secretaria tenía que subir a un segundo alto donde estaban los exámenes. Se demoraba algo…el hombre sudaba. Al rato la tipa se asoma, tiene una cara seria; desde lo alto hace una seña de esas que utilizan los árbitros cuando un jugador queda quieto al llegar a base. El periodista entendió que estaba ¡listo! Casi se desmaya, pero le vino el alma al cuerpo cuando le aclararon la jugada: ¡todo había salido bien!

Siempre recuerdo una colega que trabajó en El Panamá América cuando yo era jefe de redacción y ahora está en La Prensa. Fue a un seminario sobre prevención del SIDA y allá le enseñaron a colocar condones con la boca. ¿Cómo es esa vaina? le preguntaba, y ella con una sonrisa a flor de labios me decía: “¡Fácil Pritsiolas, es cuestión de práctica!”.

A otro periodista la redacción lo apodaba “Tres Patas”, los muchachos le fregaban la paciencia y bromeaban que el hombre usaba de preservativo una funda con las que forran el pan de flauta.

Pero aparte de la broma, cuenta la historia que el condón más antiguo apareció en la tumba de Tutankamón, sepa Dios para qué quería el faraón egipcio ese capote si ya estaba listo y frito. Un tal Lord Condom, supuesto doctor de Carlos II de Inglaterra, utilizó otra funda para frenar al monarca que andaba como un “pipi sweet” dejando hijos bastardos por doquier.

Desde que salió el SIDA en 1981, el cauchito que ahora viene de toda clase de colores, formas y hasta de sabores, debería utilizarse más, pero en ocasiones puede más el gustazo y luego viene el garrotazo.

35 chicas preñadas al día

Las cifras de la Contraloría revelan que en el 2015 unas 10 mil 946 jovencitas de entre 10 y 19 años quedaron embarazadas; es decir cada día preñan a 35 panameñitas; y en menos de 60 minutos una pelaíta está fabricando un pelaíto.

Más alarmante es que el 75% de los infantes panameños nacen en hogares sin uniones estables; además, el VIH-Sida es la tercera causa de muerte en jóvenes de 15 a 24 años de edad.

Una encuesta sexual del 2009 reveló que el 78% de los chicos panameños de entre 15-24 años utilizaban condones en sus relaciones y apenas el 39% las mujeres. En su primera relación sexual el 47.4% de los jóvenes usaron preservativos y en cuanto a las chicas la cifra fue de 29.2%

La ginecóloga y escritora Rosa María Britton explica que el uso del preservativo o condón es necesario, pero antes de la compra el hombre debe revisar el tamaño: S, M, L y hasta XL.

Los mismos no pueden estar metidos en la cartera, porque cuando se pega el caucho puede tener huequitos; tampoco pueden estar apachurrados.

Rosa María explica que hay marcas buenas como malas. Yo los he probado todos…exclama y me sorprende con eso, pero al instante aclara: “no porque yo los haya usado, sino que he metido el dedo y hay algunos buenos".

Hay que tener protección

Britton expresa que si tu pareja te exige acostarte sin preservativo, no lo hagas. "Esto tiene que ser una decisión estrictamente de la mujer y si el hombre se lo exige, usted diga: 'no papi, esto no procede y adiós'... Hay que tener protección", enfatiza la especialista.

Existen mujeres que son alérgicas al látex, por lo que recomienda buscar otras opciones, como por ejemplo, los preservativos que están hechos de piel de cordero, solo que son un poco más costosos que los comunes.

Prueba de VIH y luego sexo pelao

La doctora indica que “para que una pareja se arriesgue a tener sexo sin protección, lo ideal es que ambos se sometan a una prueba de VIH y se lo hagan cara a cara y luego, viene la relación sexual; desgraciadamente en este mundo: hay un montón de gente que anda positivo y no se ha dado cuenta", resaltó.

Hay alrededor de 20 enfermedades venéreas que se pegan a través de la vagina y del pene; la sífilis había desaparecido y ha regresado con más fuerza, explicó la doctora.

"La gente no piensa y dice que a mí no me va a pasar eso (de quedar infectado de VIH), la gente dice: 'ah, eso le pasa solo a los homosexuales, a mí no', pero el 80% de los casos de VIH son de personas heterosexuales y de personas sumamente jóvenes”. 

Alcohol los pone estúpidos

Explica que la principal causa de tener sexo sin condón es el alcohol. "Somos estúpidos, la gente pierde la conciencia de sus actos por el alcohol, el seco. Por eso, los que andan por ahí y tienen la debilidad del sexo deben practicarse sus exámenes constantemente. Usen condón que eso es bueno", concluyó.

Fred Lammie, conocido como “Forrito”, es un hombre de medio que hoy vive en España. Sabe de las tentaciones y siempre recomienda como algo imperioso usar condón al tener relaciones sexuales con un desconocido.

Para “Forrito” solo se debería mantener relaciones sexuales sin protección con una pareja estable que goce de nuestra confianza y con la que se respete un pacto de fidelidad y total honestidad. 

A Darwin Ureña no le gusta tener relaciones sin preservativo, porque no es la vida de otro, sino mi vida. Sí he tenido relaciones sin condón, pero hace muchos años; ya en este tiempo no se puede tener relaciones sin preservativo... “Todos los seres humanos en algún momento hemos tenido relaciones sin preservativo, para hacer eso, lo ideal es una prueba de VIH, esto es con condón o si no nada".

Karen Peralta afirma que “nunca ha aceptado una propuesta de una persona que no quiera usar preservativo, porque hay que cuidarse. Cuando era más joven me pasaba  mucho que me proponían relaciones sin preservativo. Para que una pareja ya tenga sexo sin preservativo, hay que tener un nivel de madurez".

Aseguró que aunque ella ya está casada, su esposo y ella se someten cada cierto tiempo a exámenes de VIH y esto va acompañado de la confianza.

Alexis Sittón dice que “nunca le han pedido tener relaciones sin preservativo, además dice ser consciente de las personas con quien se mete. Si me lo proponen digo no, porque hay muchas enfermedades y muchas cosas en juego y si no conoces a la persona no te vas a arriesgar... Yo pediría una prueba de VIH antes".

Utilizar el condón es una decisión particular, pero a menos que a usted le guste jugar a la ruleta rusa, donde su arma tiene forma de pene y la sien es una vagina, lo más seguro es forrarse la cabecita con un chaleco de látex; eso le puede salvar la vida.