Nacional - 30/10/25 - 12:00 AM

Minera reconoce que el Estado es dueño de los minerales y expresa voluntad de alcanzar nuevo acuerdo

Por: Redacción Crítica -

Cobre First Quantum Minerals Ltd. (FQML), empresa operadora de la mina Cobre Panamá, reconoce que el Estado panameño es el propietario de los minerales del país, tal como lo ha señalado el presidente de la República, José Raúl Mulino.

Según un reportaje de Bloomberg, la compañía manifestó su disposición de reiniciar conversaciones con el gobierno panameño luego del cierre de operaciones del proyecto minero, en 2023.

De acuerdo con la publicación, el CEO de la compañía, Tristan Pascall, reafirmó el reconocimiento pleno de la propiedad soberana de los recursos de la República de Panamá.

“Mantenemos la esperanza de que, mediante un diálogo continuo y buena voluntad, podamos alcanzar un nuevo acuerdo justo y duradero que brinde los mejores resultados para todas las partes interesadas”, expresó Pascall.

Además, dejó claro que la empresa está comprometida con alcanzar una estructura fiscal “justa” que refleje no solo los beneficios compartidos, sino también los más de $10 mil millones ya invertidos en el país.

En tanto, Bloomberg informó que FQML suspendió en marzo dos procesos de arbitraje internacionales (uno bajo el tratado de libre comercio entre Canadá y Panamá y otro ante la Cámara de Comercio Internacional), en un gesto de buena voluntad para facilitar un nuevo acuerdo con la administración de Mulino.

La compañía espera ahora la definición oficial de la fecha de inicio para una auditoría independiente que permita evaluar las condiciones de las instalaciones y los riesgos ambientales, proceso que el gobierno había indicado que estaría listo hacia finales de este año.

En el último trimestre, FQML exportó el cobre almacenado en el sitio, utilizando los ingresos para preservar y cuidar las instalaciones cerradas.

El medio señala que esta postura abre una ventana de oportunidad para el país, ya que la reapertura de la mina “impulsaría la economía panameña”, pero el camino deberá recorrerse con cautela, luego de las protestas masivas que marcaron el cierre del proyecto.