¿Se distancia ‘El Patrón’ o lo distancia Varela?

¿Se distancia ‘El Patrón’ o lo distancia Varela?

¿Se distancia ‘El Patrón’ o lo distancia Varela?

Por: Juan Pritsiolas Crítica -

Las fichas de “El Patrón” Stanley A. Motta Cunningham empiezan a salir del gobierno varelista. Hay quienes alegan que van en retirada programada; otros, que se huelen un tamal podrido en lo de Odebrecht, y otros, que los están echando.

Ya la primera baja fue Mirei Endara de Heras, quien anunció ayer su renuncia como ministra de Ambiente, alegando que el cargo era “desgastante y no sostenible” para ella; son razones meramente “personales y familiares”, sostuvo la funcionaria, al tiempo que agradeció el apoyo del mandatario Juan Carlos Varela.

El viceministro Emilio Sempris asumirá temporalmente el ministerio, a partir del 1 de abril, pero hay varios candidatos para reemplazar a Mirei de Heras, aunque quien tiene mayor opción es Carlos González, director de la Anati.

En círculos varelistas advirtieron que en mayo próximo se acercan a los dos últimos años del Gobierno y se busca colocar fichas políticas en el Gabinete y puestos claves del Gobierno en busca de algo casi imposible: la reelección.

En el varelismo ya trabajan varias facciones, entre esas, de los “matraqueadores” José Luis Varela y Adolfo Valderrama, grupo al que ya se sumó el alcalde José Blandón. Hay otro grupo integrado por Carlos Duboy y Álvaro Alemán, y un tercero: el de los ministros de Plaza Edison. Todos coinciden en colocar fichas políticas en el Gobierno.

Ya se anticipa que Joseph Fidanque III presentará dentro de poco su renuncia a la gerencia de Tocumen, S.A. y sería reemplazado por Carlos Duboy, quien aunque formó parte del Grupo Motta, ostenta un alto cargo en el directorio del panameñismo y fue subtesorero de campaña del hoy mandatario Juan Carlos Varela.

Duboy dejaría la Secretaría de Metas para darle paso al diputado Adolfo Valderrama, a quien se busca proyectar como uno de los potenciales candidatos presidenciales del varelismo.

Carlos Duboy también figura en la terna presentada al Ejecutivo para la dirección de la Caja de Seguro Social, pero en esa posición se apostaría al médico y exembajador en Japón y Taiwán Alfredo Martiz Fuentes.

Iván Barría, gerente de Etesa, es otro funcionario allegado a los Motta que está en línea de renuncia o salida. La crisis que se registró el viernes con el apagón que afectó al área metropolitana, San Miguelito y Colón y dejó a hogares y negocios sin energía hasta por casi 15 horas aceleraría su salida.

¡No creas en teorías de la conspiración!, exclamó un allegado a los Motta al preguntarle qué estaba pasando.

Desde hace semanas, Frenadeso ha estado insistiendo sobre un supuesto plan del poder económico liderado por Motta para desechar a Varela como presidente y colocar en su reemplazo a la vicepresidenta Isabel De Saint Malo, ante la posibilidad de que salga pringado en las coimas de Odebrecht.

Lo cierto es que en algunos círculos sugieren un supuesto distanciamiento entre Varela y “El Patrón”, a quien el presidente no le tomaría las llamadas desde hace un mes, cosa que se hace difícil pensar, tomando en cuenta que el empresario de 72 años es el hombre que mueve los hilos del poder económico en Panamá y que junto a sus socios y familia se le atribuye una fortuna de $2,500 millones.

Stanley siempre fue un hombre de bajo perfil, pero con Varela –cometió una novatada extraña en él– saltó a primer plano desde el primer día de gobierno en aquel famoso acto en Colón, el 1 de julio de 2014. Sus empresas, familiares y allegados fueron fuertes donantes de la campaña de Varela. ¡Desde allí quedó marcado como oficialista!

Ya antes otras fichas de Motta habían salido del gabinete, entre ellos, Melitón Arrocha (Mici) y Rogelio Donadío (viceministerio de Seguridad). Sin embargo, aún permanece en el círculo cero de Varela el banquero Francisco Sierra, quien comparte cargo directivo en el Banco General con Stanley Motta.

También se ve venir la salida del contralor Federico Humbert, quien pretendía dejar el cargo en enero del 2018, pero hay quienes afirman que mantiene fuertes contradicciones con el varelismo, lo que anticiparía su renuncia.

Humbert es una de las fichas del poder económico para una candidatura presidencial, pero ha quedado inmerso en el escándalo del manejo de las donaciones y contratos por $82 millones en la Asamblea Nacional. Su convocatoria a la cabalgata de hoy en la Feria de David fue aprovechada para hacer una singular protesta en la Contraloría a la cual se llevó un caballo. ¡Fredy debe auditar, no cabalgar!, gritaban los manifestantes.

La guerra fría entre grupos alineados a Stanley Motta y el Gobierno se remonta a mediados de enero, cuando el Movimiento Independiente (Movin) tildó de “incapaz” a Varela de proteger los intereses del Estado y de perseguir a los responsables en el caso Odebrecht.

El 20 de enero, integrantes de Movin enviaron una carta directa a Varela en la que le manifestaron que apoyaron su candidatura presidencial, pero "nunca nos imaginamos que le faltaría la necesaria voluntad y liderazgo para impulsar los cambios institucionales y políticos que Panamá reclama, y que, a propósito, fueron parte de su plan de gobierno".

"Consideramos que su gobierno no ha sabido, a la fecha, proteger los mejores intereses del Estado y ha sido incapaz de determinar los sobrecostos y coimas pagadas por Odebrecht, aumentando la desconfianza ciudadana en nuestras instituciones", planteó Movin.

Luego una carta firmada por 12 ministros dejó en evidencia el infiernillo entre el oficialismo y este grupo aliado, pero lo preocupante del tema fue que el documento no lo firmaron la canciller Isabel de Saint Malo y la saliente ministra Mirei Endara.

El Gabinete tildó de desenfocado el pronunciamiento de Movin y les recordó que era mala educación hablar con la boca llena: "esta falsa afirmación causa sorpresa, tomando en cuenta que miembros de esta agrupación colaboran actualmente en la gestión de Gobierno… por lo que es extraño que se intente sacar ventaja de un tema judicial, dándole un giro politiquero".

Los reclamos de Movin se dieron mucho antes de las revelaciones del que nunca lo partió un rayo: Ramón Fonseca Mora. “Juan Carlos me confesó que recibió donaciones de Odebrecht”, gritó el socio del bufete que provocó la filtración Panamá Papers. Después de eso lo guardaron en la sede de la Policía y cerró el pico, mejor dicho la boca.

Conforme se acerca la delación del fin del mundo de Odebrecht, se complica la situación en torno a Varela. Esta semana, el abogado Sídney Sittón requirió a la fiscalía que pida asistencia judicial a Suiza, Brasil, Estados Unidos, Hong Kong, China, Antigua y Barbuda sobre cuentas de la Fundación Don James, la que fue alimentada con fondos de consulados de allegados al presidente y el jurista sostiene que también recibió plata de la constructora brasileña.

Así las cosas, la pugna entre los varelistas y los de Movin generó esta semana un extraño mensaje del director general de Ingresos, Publio Cortés: “en el Gobierno hay funcionarios supuestamente independientes que están haciendo daño a la gestión. No todos, pero los hay”.

Hay quienes afirman que ese dardo iba directo a la zarina anticorrupción Angélica Maytín, por cuestionar el “conflicto de intereses” entre el contrato de asesoría del Metro con la firma Morgan y Morgan, del que forman parte el ministro Dulcidio De La Guardia y el vicecanciller Luis Miguel Hincapié.

Ya hay una corriente entre el varelismo de emplazar a los funcionarios “independientes” con periodos fijos a alinearse con el Gobierno, de lo contrario, tendrían que renunciar a los jugosos salarios que perciben.

El problema que tiene el varelismo es que a estas alturas, salvo políticos panameñistas, pocos aceptarían un cargo en el Gobierno. Así ha pasado con la junta directiva de la Caja de Ahorros, que todos le han renunciado y solo quedan dos integrantes que son funcionarios: Duboy y Gustavo Valderrama, hermano del zarandeado mediáticamente Adolfo “Beby” Valderrama.

Frente a ese escenario, el varelismo se imagina y verdaderamente se lo cree que va a repetir en las elecciones del 2019. Su “lógica” es que habrá una pluralidad de candidatos presidenciales: PRD, CD, FAD y como 3 independientes, pero que ellos conservarán el 33%, que será suficiente para ganar. ¡Soñar no cuesta nada… pero la realidad siempre es otra! Si alguien lo duda solo hay que preguntarse ¡Qué Xopá Mimito!

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