Propiedades curativas de la granada
El nombre de granada proviene del latín y significa “fruta de muchas semillas”. La granada ha sido consumida desde épocas remotas. Se sabe que los faraones
El nombre de granada proviene del latín y significa “fruta de muchas semillas”.
La granada ha sido consumida desde épocas remotas. Se sabe que los faraones del Antiguo Egipto ingerían el jugo de granada y que también aparece en algunas de sus tumbas, como un buen acompañante en su viaje al más allá.
Propiedades nutritivas
La granada es muy rica en potasio, fibra, vitamina C y en niacina, la vitamina hidrosoluble que favorece el metabolismo y el buen funcionamiento del hígado.
También ayuda a reducir el colesterol malo o LDL y es muy rica en pectina, antioxidantes, flavonoides, fibra, vitaminas (E, C, B1, B2, B3, B9), fósforo, cobre, hierro, zinc y calcio, y es especialmente rica en manganeso, potasio y taninos, de ahí el amargor de su piel.
Propiedades curativas
Según un estudio realizado por la Universidad de California, se pudo determinar que la granada resultó ser una de las frutas de mayor actividad frente a los radicales libres por su mayor contenido en polifenoles antioxidantes. Su poder fue alrededor de un 20% superior al de la uva, el vino tinto, las moras, las naranjas e incluso el propio té verde (también el té blanco).
Por esa razón, se considera que ayuda en la lucha contra el envejecimiento y ciertos cánceres, como el de la piel y el de la próstata.
La granada también es una aliada para curar la tos persistente, dolor de garganta, asma, y protege eficazmente contra enfermedades cardiacas. Debido a sus propiedades astringentes, la granada favorece el alivio de diarreas y cólicos intestinales. Igualmente, combate los parásitos intestinales.