Análisis del discurso de Varela

En su informe de primer año de gestión gubernamental, el presidente de la República, Juan Carlos Varela esbozó más proyectos y obras por hacer que las que ya ha realizado o está desarrollando, no sin antes haber advertido: “No vengo a hablar de logros sino a compartir los avances en la gestión de gobierno, plantear los desafíos que vive nuestro país y lo que siento que tenemos que hacer”. Durante su discurso de 53 minutos de duración, Varela mencionó casi 80 palabras o verbos para referirse a lo que ya hizo su gestión de gobierno y usó otro número parecido de conceptos para resaltar lo que su administración está haciendo; no obstante, su informe fue dominado por más de 130 verbos para recordar lo que él y su equipo aún no han ejecutado y que -dijo- van a desarrollar. Al revisar entre líneas el mensaje de Varela, se percibe lo que muchos psicólogos llaman “determinismo religioso” y una fuerte influencia de la Iglesia y de la misma formación cristiana del gobernante, la cual muchos atribuyen al -radical y ultraconservador- movimiento denominado Opus Dei, en el cual se congrega la más alta élite de la iglesia Católica. Aún Varela no supera la fase de estar atacando a la administración anterior y lo dejó en evidencia cuando afirmó que “hace unos años, la vida pública estuvo muy cerca de ser dominada por el pecado de la codicia, lo que llevó a que la acumulación de riquezas fuera la prioridad del Gobierno en lugar del servicio al pueblo” y según él “esto se terminó y Panamá unida lucha por desprenderse de ese pecado”. Varela dice que “gracias al respaldo recibido del pueblo panameño el 4 de mayo, Panamá cuenta con un gobierno comprometido con la transparencia, respetuoso de la separación de poderes, la libertad de expresión y los derechos humanos”; aseveró que ahora “nadie está por encima de la ley” y contrario a lo que muchos panameños piensan, se atrevió a decir que “somos un país donde la política del negocio y el clientelismo ha quedado atrás para dar paso a una política de servicio y visión de Estado”. MÁS TIEMPO Y “RECONCILIACIÓN” Dejó claro que los procesos contra los funcionarios de la gestión anterior -de la que él formó parte por más de dos años y en la que fungió como vicepresidente y canciller- continuarán, excusándose en que “ante la cantidad de irregularidades encontradas, he dado un plazo adicional de 6 meses a nuestro equipo de Gobierno para que se concluya la revisión de la pasada administración y todas las faltas que hayan sido cometidas sean presentadas ante las autoridades competentes”. El jefe del Ejecutivo también hizo una paráfrasis de la “reconciliación” nacional a la que se refirió hace pocos días el arzobispo metropolitano de Panamá, José Domingo Ulloa, y otras personalidades que se autodenominan “sociedad civil” e “independientes” cuando el exdictador Manuel Antonio Noriega pidió “perdón”. Según Varela, “si el expresidente Guillermo Endara pudo reconciliar al país después de 21 años sin democracia y una intervención militar, les aseguro que este presidente lo va a reconciliar de los últimos años de negociados y falta de transparencia”. Manifestó que “hemos fortalecido nuestra democracia, instalando un gobierno honesto, de diálogo, consensos y unidad nacional, abierto a la sociedad civil”, la misma de la cual -algunos miembros- le reprocharon a varios funcionarios que él designó para ocupar cargos sensitivos en el engranaje de la cosa pública. Sin embargo, según dejó entrever, ahora sí los tomará en cuenta: “Me corresponde designar nuevos magistrados de la Corte Suprema de Justicia. Con estas designaciones en las que tomaremos muy en cuenta las opiniones de la sociedad civil, tengan la seguridad de que fortaleceremos el sistema judicial”. MEJOR, SE DAÑA... El mandatario “pintó” un país que muchos panameños no ven ni sienten: “Los Proyectos que anuncié al país al asumir la gestión de nuestro gobierno, avanzan a ser realidad. Empezamos desde el primer día con el control de precios de emergencia en 22 productos de la canasta básica incluyendo 5 cortes de carnes, huevos y pollo, que al día de hoy se mantienen. Todos los panameños pueden ir al supermercado, la comida cuesta lo mismo que hace un año y no hay especulación en los precios de los alimentos. Los salarios aumentan y la comida mantiene su precio”. De acuerdo a sus matemáticas, Varela contabiliza que “los homicidios han bajado en 25%. Sin embargo para mí esto no es suficiente. Falta mucho por hacer. Panamá y su pueblo no se merecen los niveles de violencia que producen estas situaciones”. Contó que “ya hemos procesado más de 25 pandillas este año y les aseguro que las 200 pandillas del país serán procesadas por el sistema de administración de justicia”, aceptó que he “designado oficiales de Carrera al mando de todos los estamentos de seguridad y aumentamos los niveles de coordinación entre los estamentos a nivel operativo”; y expresó con orgullo que “este mes entrará en vigencia un ajuste salarial de 110 balboas para las unidades de la fuerza pública y estamos aumentando nuestro pie de fuerza”. Destacó entre sus logros: Techos de Esperanza, Beca Universal, Sanidad Básica, e hizo una larga lista de lo que aún no ha hecho y dice que hará: Aumentará el salario mínimo a $500 a todos los servidores públicos, clausura de los vertederos, Línea 2 del Metro y las gestiones para la Línea 3, nuevo plan del Metrobus, carretera a Darién, ampliación a ocho carriles de la carretera Interamericana desde el puente de Las Américas hasta Arraiján, ensanche a seis carriles de esa misma vía desde el tramo de Arraiján hasta San Carlos, eliminación de las escuelas rancho y la implementación de una sola jornada escolar. RETOMARÁ PROYECTOS DE 'EL LOCO' Varela anunció que “reactivaremos las obras de construcción de los hospitales que se encontraban abandonados en Colón, Chiriquí, Darién y los Santos, tras haber renegociado los términos contractuales con la empresa contratista en beneficio del Estado” y anunció que “el 1 de agosto se relanzará el Proyecto de la Ciudad Hospitalaria como Ciudad de la Salud y se definirá la ruta por donde se construirá la vía de acceso a esta obra”. Recapacitó que “las obras de la Administración anterior que han sido debidamente revisadas y todas las obras de nuestro Gobierno que están siendo licitadas con transparencia tienen que seguir avanzando y serán concluidas por el bienestar del pueblo panameño. Estamos tomando las previsiones técnicas y administrativas necesarias para que las principales obras de nuestro gobierno se liciten dentro de los próximos 6 meses”; según sus cuentas: “El Gobierno ha licitado casi $4 mil millones en obras que pronto estarán en ejecución y ayudaron a fortalecer el crecimiento económico y mejorar la calidad de vida de los panameños”. En materia de relaciones internacionales habló de la posibilidad de votar a favor del ingreso de Palestina a la Organización de Naciones Unidas y advirtió que “no vamos a permitir, que se perjudique la imagen de Panamá y en caso de que algún país nos mantenga en cualquier tipo de lista, el próximo año para estas fechas aplicaremos la Ley de Retorsión”. En materia de reformas electorales, se mostró “a favor de una mayor participación del Estado en el financiamiento de las campañas políticas” y en cuanto a su promesa de reformar la Constitución, rememoró que “hace 1 año me comprometí a hacer un anuncio el día de hoy sobre el tema de la Constituyente. Sin embargo, siento que no es el momento”.