Cae otro implicado en red de narcotráfico; es un funcionario del aeropuerto
Este hombre es un trabajador del área de carga de la terminal aérea, con lo cual se eleva a casi 10 los funcionarios aeroportuarios que figuran entre los detenidos en el marco de las operaciones Eros y Colibrí.
Panamá- A 60 personas asciende la cifra de individuos vinculados con una red de narcotráfico desarticulada que utilizaba a Panamá como puente para el envío de drogas hacia Estados Unidos y Europa, luego de que un nuevo sospechoso fuera aprehendido al mediodía de este jueves en el Aeropuerto Internacional de Tocumen.
La información fue confirmada por la Policía Nacional, entidad que detalló que este hombre es un trabajador del área de carga de la terminal aérea, con lo cual se eleva a casi 10 los funcionarios aeroportuarios que figuran entre los detenidos en el marco de las operaciones Eros y Colibrí, mediante las cuales se desarticuló esta macro red de narcotráfico.
Los aprehendidos, entre los cuales también figuran exfuncionarios del aeropuerto, fueron presentados hoy ante un juez de garantías, quien deberá declarar legal la aprehensión de las 60 personas y dar por presentada la imputación por los delitos de tráfico internacional de drogas y conspiración para delinquir. Además de establecer las medidas cautelares a cumplir mientras dure la investigación.
Durante las más de 60 diligencias de allanamiento realizadas por la Fiscalía Especializada en Delitos Relacionados con Drogas y la Policía Nacional en Panamá Este, Panamá Oeste y Veraguas, entre otras provincias donde operaba la organización, también se incautaron 10 armas de fuego, más de 200 municiones y 39,965 dólares en efectivo, entre otros indicios.
La organización receptaba la droga procedente de Colombia en las costas del Pacífico panameño, específicamente en las provincias de Darién, Panamá, Panamá Oeste, Coclé y Los Santos, utilizando lanchas rápidas y embarcaciones de pesca artesanal. Posteriormente, la sustancia ilícita era introducida en cajas, maletas y equipajes los cuales enviaban a Francia, España y Países Bajos, en Europa y Estados Unidos, a través de aerolíneas comerciales de pasajeros y carga.
Para ello, en algunos casos sustraían la colilla de identificación de los equipajes de viajeros comunes para colocársela a maletas preñadas con drogas en la terminal aérea, donde trabajaban muchos de sus miembros.