Conmemoran décimo aniversario de la tragedia del 8B-06

Con dos misas realizadas la mañana de este domingo y colocación de ofrendas florales, sobrevivientes y familiares de las víctimas de la tragedia vial ocurrida el  23 de octubre 2006, conmemoran 10 años del suceso que tuvo lugar en  La Cresta.

Una de las misas se realizó en la  iglesia María Claret, ubicada en la avenida 12 de Octubre, en Pueblo Nuevo, la cual fue presidida por Monseñor José Domingo Ulloa, quien durante la homilía sustentó que es impresindible que las autoridades establezcan de forma coordinada una estrategia que garantice las condiciones necesarias para salvaguardar los derechos y evitar daños causados por accidentes.

Además Ulloa también solicitó que se mejore el servicio de transporte público y que las vías se tracen, pavimenten y señalicen de forma segura y adecuada.

Señaló que “es una gran ocasión para una reflexión nacional sobre la seguridad vial”.

En este sentido, alentó a los familiares presentes en la homilía, a seguir en su lucha de justicia y mejores condiciones de transporte.

“Es justo, seguir suplicando sin cansarnos por el derecho que tenemos a tener un transporte digno”, mencionó.

Y concluyó diciendo que esta lucha constante “ese es el mejor homenaje que podemos hacerles a quienes han sido víctimas ayer y hoy de la fragilidad de estos servicios públicos y de la irresponsabilidad de tantos conductores”.

En esa misma homilía también estuviron presentes representantes de los pacientes envenenados por el dietilenglicol quienes también cumplen 10 años de este hecho.

En tanto en la iglesia Don Bosco en Calidonia, se realizó otro misa, a la que acudió otra parte de las familiares y sobrevivientes de la tragedia.

Tras las homolías los actos de recordación se trasladaron a La Cresta, en avenida Martín Sosa, al punto exacto donde aquel 23 de octubre de 2006, 18 personas murieron calcinadas y otras 25 personas resultaron heridas, dentro del bus 8B-06 de la ruta Mano de Piedra - Corredor Norte.

Allí los familiasres de las víctimas  y sobrevivientes de la tragedia colocaron ofrendas florales en el monumento a las víctimas y pintaron corazones azules en la avenida Martín Sosa.

Lidia Atencio, sobreviviente, dijo que 'tenemos una ATTT (Autoridad de Tránsito y Tránsporte Terrestre), ciega, sorda y muda'

En tanto María Elena Rojas, familiar de una de las víctimas, solicitó al presidente de la República que se mejore el sistema de transporte, porque actualmente sigue siendo lo mismo.

Mientras que la hermana de Doriselia Bonilla, víctima de la tragadia, sustentó que estos 10 años ha sido un dolor que no sana en el corazón, porque hasta la fecha no se tiene una justicia en Panamá tras la tragedia.