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‘Cunday’ dejó huellas imborrables

‘Cunday’ dejó huellas imborrables

‘Cunday’ dejó huellas imborrables

Por: Alfredo Franceshi Especial para Crítica -

Narcilo ‘Cunday" Marquínez, un destacado pelotero herrerano y de Panamá, falleció el lunes a las 84 años de edad.

Fue un jardinero central de lujo. Hacía las jugadas fáciles con su estupendo fildeo. También bateaba y lo demostró en 1963 y en el tricampeonato ganado por Herrera entre 1965 y 1967.

"Era un tremendo jugador, nadie como el en el central. Además fue destacado en el fútbol y en el baloncesto, recuerda el profesor José ‘Pepe’ Cassino, quien jugó con ‘Cunday’ Marquínez.

"Así como bateaba sabía hacer goles", recordó ‘Pepe’ Casino.

Para Cassino, Rutilio Cedeño en el jardín izquierdo, ‘Cunday’ Marquínez en el centro y Rodolfo Ríos, en el derecho, han sido los mejores patrulleros herreranos.

Su gran año fue en 1963 cuando ganó el título de bateo con .480, el de carreras impulsadas con 14, anotó 14 carreras y resultó el Jugador Más Valioso del Nacional de Béisbol Mayor.

En 1962 fue el líder en carreras remolcadas con un total de 15.

En 1965 fue campeón jardinero central con mil puntos de promedio.

El jugador herrerano jugó con Panamá en el Mundial de 1965, en Costa Rica, bateando de 15-3.

En los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1966, en Puerto Rico, lució la franela de Panamá, bateando de 24-7, se estafó cuatro bases, impulsó cuatro carreras y pegó dos dobles.

La profesión de ‘Cunday’ Marquínez era chapistero, pero su amor era el béisbol. Lo jugaba con garras.

Uno de los grandes peloteros herreranos de todos los tiempos.

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