Golazo - 29/9/13 - 11:18 PM

Con el orgullo herido

Hace pocos años la selección de Panamá era una de las cenicientas del área. A los grandes de la Concacaf no les asustaba en lo mínimo, sobre

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Eduardo González [email protected]

Hace pocos años la selección de Panamá era una de las cenicientas del área. A los grandes de la Concacaf no les asustaba en lo mínimo, sobre todo en casa, al medirse a un equipo como la Roja.

Hoy la dinámica ha cambiado. El combinado nacional ha crecido, se ha ganado un puesto y un respeto en la región y ya todos ven a Panamá con ojos diferentes, con mucho más cuidado.

Y el “todopoderoso” México es uno de esos gigantes de la Concacaf que ha tenido que aprender, a las malas, a tomarse más en serio a los istmeños. Sobre todo porque el Tri ha dejado de ser ese rival inalcanzable e insuperable. Sí, hoy el Tri gusta poco, y el tiempo en el que avasallaban a sus adversarios y les endosaban escandalosas goleadas parece haberse acabado ya.

Desde la eliminatoria de 2005, rumbo al Mundial de Alemania 2006, México y Panamá se han visto las caras en siete enfrentamientos oficiales, incluyendo cuatro por Copa Oro. El balance es más parejo que nunca: dos victorias para cada rival y tres empates. Números idénticos para dos equipos que los separa un largo trecho, tanto en el aspecto deportivo, como en el económico e histórico.

El 11 de octubre ambos combinados chocan en el estadio Azteca, en un encuentro donde se jugarán casi todas sus opciones de seguir con vida y luchando por llegar al Mundial de Brasil 2014.

México quisiera convencerse de que puede ganar este cotejo con el peso de su camiseta, pero el pasado reciente poco lo apoya. Ya son cuatro choques seguidos en los que no puede vencer a la Roja (dos derrotas y dos igualadas). Tres de estos choques citados han tenido un elemento coincidente, la figura de Julio César Dely Valdés en el banquillo de Panamá. A “El Panagol” parece dársele bien enfrentar a México, el único equipo de esta Hexagonal, aparte de Jamaica, con el que no ha perdido en su era.

A México hoy día le preocupa sobremanera quedar fuera del Mundial. Se pueden perder más de 600 millones de dólares y, además, gran parte de su orgullo y honor si Panamá vuelve a convertirse en su verdugo. El modesto elenco canalero, uno de los principales responsables de agravar la actual crisis mexicana -que provocó el despido de José Manuel de la Torre y, posteriormente, el de Luis Fernando Tena-, esa selección a la cual recientemente dijeron que ganarle sería como un día de campo, vuelve a aparecerse en el camino de los aztecas.


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