Cuando se jugaba en el Juan Demóstenes y otros recuerdos
Cuentan los viejos parroquianos del estadio Nacional Juan Demóstenes Arosemena, que los domingos cuando se jugaba la pelota profesional, la gente bajaba por Calidonia, hacían un alto en un centro llamado Lo que el Viento se Llevó, administrado por Willie Hinds y luego se dirigían al estadio.
En ese tiempo era un lujo ver lanzar a Humberto Robinson, Alberto "Mamavila" Osorio, Winston Brown, Leslie Scott, Lenny Martínez y a los lanzadores importados.
Y ver en acción a estrellas como Clyde Parris, Héctor López, Bobby Prescott, Chico Salmon, Frank Austin, Henry Mitchell, Pablo Bernard, Chico Heron, Milo Phillips, Iván Murrell, Oliverio Sparks y otros. Tenían su estilo todos ellos.
En el coloso de Cabo Verde, las provincias de Chiriquí, Los Santos, Coclé y Veraguas ganaron sus primeros títulos en el béisbol mayor. En una época dorada de grandes momentos.
En un día de 1964, el chiricano José Lizondro casi lanza un juego perfecto frente al equipo Novatos. Solo se le embasó un corredor y fue por error. Y en la serie de estrellas panameñas vs. Piratas en 1971, Leonardo Martínez Ferguson tuvo el honor de ponchar al inmortal Roberto Clemente, un ponche para contar. Dicen que fue un "slider" hacia afuera del plato.
Recordar es vivir
Héctor López no es una figura olvidada por los amantes del béisbol. Él fue el segundo en llegar a las Grandes Ligas, pero el primero en un montón de cosas tanto locales como en las Ligas Mayores. Recordamos que en el gobierno de Moscoso fue condecorado por iniciativa del canciller José Miguel Alemán, alias "Diente Frío".
TIPS
Quien de los viejos fanáticos no recuerda el estadio de béisbol de Barraza. Era un parque pintoresco y ver cómo los jonrones iban a dar a la playa, era otro espectáculo. Entre los que recordamos, ahí jugaron Manny Sanguillén, Rennie Stenett, Toti De Souza, Milo Phillips, Dany Herrera, Jerry Welch, Ray Lewis, José Murillo, y una gran cantidad de los mejores peloteros de esos años. Ñato Pedroza dirigía la liga y, además, era árbitro.
En ese desaparecido parque de pelota Rony Montero ponchó a 21 bateadores en siete entradas. Esto fue en los años 70.
(Seguiremos en otra entrega)