Lo bueno, lo malo y lo feo del Mundial
Lo bueno del Mundial son los estadios. Hemos visto infraestructuras nuevas y maravillosas, la arena Corinthians de São Paulo, la Dunas de Natale y Fonte Nova de
Lo bueno del Mundial son los estadios. Hemos visto infraestructuras nuevas y maravillosas, la arena Corinthians de São Paulo, la Dunas de Natale y Fonte Nova de Salvador: los intensos aguaceros que han caído en la parte norte de Brasil no han afectado las canchas.
Lo malo ha sido el arbitraje del japonés Nishimura en la jornada inicial. Le regaló el penal a Brasil.
Lo feo, que los diariosbrasileños hayan ignorado la jugada.
Lo bueno, el espectaculargol de Van Persie de palomita que bañó a Casillas.
Lo malo, la oportunidad que perdió Arsen Robben cuando, después de un pase filtrado de Sneijder, queda solo ante Casillas y el portero vuelve a frustrar su grito de gol como en la final de Sudáfrica.
Lo feo, la “pararrandeada” que Robben les dio a los españoles Piqué y a Ramos en el área grande para después vencer a Casillas y tomar venganza.
Lo bueno, que la venganza holandesa continúa y los holandeses anotan más goles.... Van Persie, Robben celebran con Van Gaal..... la venganza es un plato que se come frío, 5-1, se desmorona el equipo de Del Bosque.
Lo feo, la silbatina que hace vibrar las gradas cada vez que toca el balón Diego Costa, el brasileño que juega para España.
En nuestra primera columna mencionamos que muchas veces en el deporte se pagan movimientos no muy éticos. Y el despojar a Brasil de Diego Costa no fue una movida bien vista por todo el mundo.
El tiempo, que lo diga el tiempo... Nada resiste el tiempo, solo Arjen Robben que, a sus 30 años, es el gran jugador del Mundial con jugadas de vértigo, fuerza, inteligencia, calidad y freno. Ha dejado tirado en el verde césped otras dos veces a Casillas y lentamente alista su pierna zurda para dejar pasar a la defensa y ¡Goooooooooool! 5 a 1.
¿Qué tiene la gente zurda que los hace indescifrables?
España no pudo contra el fútbol vertical de Holanda.
Lo bueno es que el Mundial enseguida brinda intensidad, drama y emociones a los fanáticos.