Mina, el goleador inesperado
El Barcelona le busca equipo, y el central colombiano Yerry Mina contradice a sus detractores marcando goles decisivos, como el conseguido frente a Senegal que ha situado al cuadro cafetero en los octavos de final del mundial.
Mina, que no jugó el primer partido ante Japón, resuelto con victoria de los asiáticos (2-1), apareció en el segundo encuentro ante Polonia y fue decisivo, ya que abrió el marcador en un partido que finalizó 3-0.
Ayer Yerry lo ha vuelto a hacer y ha sido determinante. Su gol fue un calco del conseguido ante los polacos, un salto limpio y un impecable remate a la red en el minuto 74 para situar a su selección en la segunda ronda.
Yerry es Yerry y no Jerry por un capricho de sus padres. José Eulises Mina y Marianela González decidieron sustituir la 'J' por una 'Y' para adaptarlo a la dicción en español y jugar de esa manera con el nombre del popular ratón de dibujos animados de Hanna&Barbera.
Con sus 6'4" de estatura, el central de Guachené ha demostrado que es un futbolista con recursos, seguramente con más fundamentos ofensivos que defensivos y que a falta de juego posicional y de toque -las armas con las que se define el fútbol del Barça-, él es más de fútbol directo, de remates en jugadas a balón parado.
Sus estadísticas con la selección de José Nestor Pékerman son espectaculares. Debutó el 8 de junio de 2016, en total ha jugado 14 partidos con Colombia y ha marcado cinco goles, seguramente un récord mundial para un defensa.
De los cinco goles anotados, cuatro han sido por medio de remates de cabeza, el otro al resolver con oportunismo un centro sobre el área, aunque todos con guion similar: aprovechando su altura tras un centro lateral.