Mundo - 25/11/13 - 09:42 PM
Candidato oficial lidera conteo en Honduras
Hubo informes no confirmados de reuniones entre funcionarios y partidos políticos, con lo que comenzaron a emerger conjeturas sobre lo que estaba sucediendo.
Honduras
AP
Las muy reñidas elecciones presidenciales en Honduras _un país asolado por la violencia y la pobreza_ quedó en el silencio el lunes, luego que los principales candidatos desaparecieron de la vista pública y que la publicación de cifras del recuento de votos fue detenida sin ofrecer resultados finales ni explicación alguna.
Después de difundir las cifras correspondientes al 54% del conteo de sufragios, pocas horas después del cierre de los colegios el domingo, el Tribunal Supremo Electoral dijo que 24 horas después su porcentaje rondaba el 60%. Los observadores electorales, que inicialmente habían calificado el proceso como limpio, no emitieron más declaraciones y emitirán sus informes el martes.
Los dos principales partidos en liza continuaron declarándose vencedores el lunes por la mañana, pero no dijeron nada más el resto del día. Ni siquiera hubo celebraciones en las calles por la presunta victoria de Juan Orlando Hernández, del oficialista partido Nacional, que tenía el 34% de los votos. No hubo globos, ni caravanas en las calles. Nada.
Su oponente más cercana, Xiomara Castro, tenía casi el 29%. El marido de Castro, Manuel Zelaya, fue derrocado en un golpe en 2009 que dejó al país sumido en la inestabilidad política. Castro no apareció en todo el lunes, pero Zelaya dijo que el partido no aceptaba los resultados.
``Defenderemos nuestra victoria y si es necesario lo haremos en las calles'', agregó.
En las calles, sin embargo, no había más de 100 manifestantes. El resto de la capital lucía tranquilo.
Para sumar elementos curiosos de la época post-golpe, el presidente de Nicaragua Daniel Ortega ha sido casi el único presidente en felicitar a Hernández como presidente electo. Ortega fue un aliado cercano de Zelaya tras su derrocamiento.
Hubo informes no confirmados de reuniones entre funcionarios y partidos políticos, con lo que comenzaron a emerger conjeturas sobre lo que estaba sucediendo.
``Los partidos políticos están negociando los resultados entre ellos'', dijo Arabeska Sánchez, investigadora y fundadora del Instituto Universitario de Paz y Seguridad, quien admitió que no participó en tales encuentros y no tenía informes de primera mano. ``Pensábamos que esta democracia estaba avanzando''.
Un funcionario que dijo que sí participó en las reuniones a puerta cerrada, dijo que los partidos analizaban diferencias técnicas en algunos de los escaneos de las actas de votación, pero que no habría ningún cambio en los resultados. La fuente accedió a hablar a condición de no ser identificado porque no estaba autorizado a hablar con la prensa.
Según las encuestas, Hernández y Castro llegaron casi empatados a las elecciones del domingo y existía el temor de que un resultado ajustado pudiese producir inestabilidad y protestas, pero la votación fue pacífica y con una alta participación.
Es probable que el ganador gobierne con un congreso dividido, cuyos 128 miembros también fueron elegidos el domingo pero de cuyo conteo poco se sabe. Como resultado, la situación política cambiará poco en un estado prácticamente fallido de poco más de 8 millones de habitantes, que tiene la tasa de homicidios más alta del mundo y por el que transita mucha de la cocaína sudamericana que llega a Estados Unidos.
Castro, de 54 años, lideró la campaña presidencial durante meses, identificándose como la candidata del cambio, prometiendo mejoras en la situación económica y una asamblea nacional constituyente con la cual refundar el país y cerrar la crisis que abrió el golpe de estado que derrocó a su esposo.
Sin embargo, Hernández, de 45 años, se hizo de la ventaja en las últimas semanas con un discurso que giró casi exclusivamente en torno a la seguridad y la creación de una nueva policía militar que pudiera patrullar las calles del país.