Mundo - 16/7/13 - 05:44 PM
"Cuidado nos quedamos sin canal y sin lago", advierte ambientaIista
El proyecto del Gran Canal de Nicaragua, incluye la vía acuática que unirá los océanos Pacífico y Atlántico, una vía seca, dos aeropuertos internacionales, zonas francas y dos puertos de aguas profundas, a un costo de 40.000 millones de dólares.
Managua
EFE
Nicaragua tendrá que crear las condiciones para que el canal interoceánico que pretende construir sea una realidad, ya que el Gran Lago de Nicaragua no soportaría un megaproyecto como este si las obras iniciaran hoy, afirmaron especialistas en recursos naturales.
"Cuando hay parámetros que señalan que este cuerpo (el Gran Lago) no está en capacidad de resistir, ¡cuidado nos quedamos sin canal y sin el lago", dijo a Efe Jacobo Sánchez, ex director del Corredor Biológico Mesoamericano en Nicaragua.
Para el especialista, quien conoció de cerca la experiencia del canal de Panamá, el punto es que las condiciones del canal no son las mismas que hace un siglo.
Según Sánchez, cuando se construyó el canal de Panamá "no había desequilibrio ecológico, era una situación diferente a la que tenemos aquí (en Nicaragua)".
"Si hoy fuera el instante de dar inicio a este proceso de alteración del sistema natural, podríamos decir que las condiciones no están dadas, porque el servicio que dará el canal requiere manejo integral de la cuenca", dijo a Efe Jacobo Sánchez, ex director del Corredor Biológico Mesoamericano en Nicaragua.
El proyecto del Gran Canal de Nicaragua, incluye la vía acuática que unirá los océanos Pacífico y Atlántico, una vía seca, dos aeropuertos internacionales, zonas francas y dos puertos de aguas profundas, a un costo de 40.000 millones de dólares.
La ruta no está definida, pero está garantizado el uso de las aguas del Gran Lago de Nicaragua, de 8.000 kilómetros cuadrados de extensión. A pesar de ser tan extenso como Puerto Rico, sus aguas son poco profundas.
Según el especialista, el gobierno nicarag ense no sólo carece de un plan de manejo de la cuenca del Gran Lago, sino que además necesita parámetros que garanticen la sostenibilidad del recurso hídrico una vez que el canal interoceánico sea construido.
"Mientras no existan esos parámetros, no va a funcionar, ejemplo de eso fue el intento de saneamiento del lago de Managua, no prepararon las condiciones, lo que se avanzó se retrocedió, ¡qué tal en un nivel mega, como el del canal!", comentó Sánchez.
El director del Centro para la Investigación de los Recursos Acuáticos (CIRA), Salvador Montenegro, coincidió con Sánchez.
"Si el canal es excavado enteramente por tierra, sin pasar por el lago Cocibolca (Gran Lago), el canal sí es ambientalmente sostenible, pero si la ruta es la misma concebida hace 140 años, entonces la situación es completamente distinta", dijo a Acan-Efe Montenegro.
Sánchez recordó que es importante definir las exigencias técnicas, como los términos de referencia para los estudios de impacto ambiental, que en Nicaragua existen para grandes construcciones, pero no para "megaproyectos".
"Todas las exigencias (del canal) obligan a que nuestros entes administrativos se adapten a este reto del país, si quisiéramos funcionar bajo el estatus de los términos de referencia actuales, vamos mal", advirtió.
Tanto el gobierno de Nicaragua como la firma concesionaria de la construcción del canal, el HKND Group, han insistido en que el impacto ambiental de la obra será adecuado.
La información oficial sobre el canal, hasta ahora, ha hecho énfasis en los beneficios económicos del país, que crecería en 10 % a partir de 2014, según datos oficiales.
EFE
Nicaragua tendrá que crear las condiciones para que el canal interoceánico que pretende construir sea una realidad, ya que el Gran Lago de Nicaragua no soportaría un megaproyecto como este si las obras iniciaran hoy, afirmaron especialistas en recursos naturales.
"Cuando hay parámetros que señalan que este cuerpo (el Gran Lago) no está en capacidad de resistir, ¡cuidado nos quedamos sin canal y sin el lago", dijo a Efe Jacobo Sánchez, ex director del Corredor Biológico Mesoamericano en Nicaragua.
Para el especialista, quien conoció de cerca la experiencia del canal de Panamá, el punto es que las condiciones del canal no son las mismas que hace un siglo.
Según Sánchez, cuando se construyó el canal de Panamá "no había desequilibrio ecológico, era una situación diferente a la que tenemos aquí (en Nicaragua)".
"Si hoy fuera el instante de dar inicio a este proceso de alteración del sistema natural, podríamos decir que las condiciones no están dadas, porque el servicio que dará el canal requiere manejo integral de la cuenca", dijo a Efe Jacobo Sánchez, ex director del Corredor Biológico Mesoamericano en Nicaragua.
El proyecto del Gran Canal de Nicaragua, incluye la vía acuática que unirá los océanos Pacífico y Atlántico, una vía seca, dos aeropuertos internacionales, zonas francas y dos puertos de aguas profundas, a un costo de 40.000 millones de dólares.
La ruta no está definida, pero está garantizado el uso de las aguas del Gran Lago de Nicaragua, de 8.000 kilómetros cuadrados de extensión. A pesar de ser tan extenso como Puerto Rico, sus aguas son poco profundas.
Según el especialista, el gobierno nicarag ense no sólo carece de un plan de manejo de la cuenca del Gran Lago, sino que además necesita parámetros que garanticen la sostenibilidad del recurso hídrico una vez que el canal interoceánico sea construido.
"Mientras no existan esos parámetros, no va a funcionar, ejemplo de eso fue el intento de saneamiento del lago de Managua, no prepararon las condiciones, lo que se avanzó se retrocedió, ¡qué tal en un nivel mega, como el del canal!", comentó Sánchez.
El director del Centro para la Investigación de los Recursos Acuáticos (CIRA), Salvador Montenegro, coincidió con Sánchez.
"Si el canal es excavado enteramente por tierra, sin pasar por el lago Cocibolca (Gran Lago), el canal sí es ambientalmente sostenible, pero si la ruta es la misma concebida hace 140 años, entonces la situación es completamente distinta", dijo a Acan-Efe Montenegro.
Sánchez recordó que es importante definir las exigencias técnicas, como los términos de referencia para los estudios de impacto ambiental, que en Nicaragua existen para grandes construcciones, pero no para "megaproyectos".
"Todas las exigencias (del canal) obligan a que nuestros entes administrativos se adapten a este reto del país, si quisiéramos funcionar bajo el estatus de los términos de referencia actuales, vamos mal", advirtió.
Tanto el gobierno de Nicaragua como la firma concesionaria de la construcción del canal, el HKND Group, han insistido en que el impacto ambiental de la obra será adecuado.
La información oficial sobre el canal, hasta ahora, ha hecho énfasis en los beneficios económicos del país, que crecería en 10 % a partir de 2014, según datos oficiales.