Dan último adiós a expresidente Arzú
Con 21 cañonazos de salva de artillería del Ejército y la entrega de la medalla "más allá del deber en gran mérito" a su esposa, concluyeron ayer las honras fúnebres al expresidente de Guatemala y alcalde capitalino, Álvaro Arzu Irigoyen, luego de su fallecimiento el viernes.
La ceremonia al ingreso del Palacio de la Alcaldía capitalina, que conjuntó a trabajadores municipales, bomberos y policías, además de miles de seguidores de Arzú, concluyó con una alabanza evangélica con un canto a Dios, promovida por la propia administración pública, siguiendo la lógica religiosa del exjefe edil y sus familiares.
Álvaro Arzú Irigoyen fue enterrado ayer en un cementerio privado en la ciudad colonial de La Antigua, en el departamento central de Sacatepéquez.