Nacional - 29/9/15 - 12:00 AM

Advierten peligros de fumar con narguiles

Por: -

El Ministerio de Salud alertó que el consumo de narguiles o shishas (cigarrillos electróncios) ha aumentado considerablemente entre la población joven del país, en especial en la ciudad de Colón, con mayor influencia árabe.

"La prevalencia en adultos ha bajado y se sitúa en el 1.7 %, mientras que en los jóvenes la situación es bastante distinta. La prevalencia de consumo de productos fumados diferente a los cigarrillos alcanza el 6 % entre la juventud", dijo la directora de planificación del Ministerio de Salud (Minsa), Reina Roa.

El consumo del narguile es más común entre chicos y se está intensificando en Colón, que tiene una alta población árabe, precisó la funcionaria.

En Panamá está prohibido fumar tabaco o consumir naguiles en cualquier espacio público abierto o cerrado (a excepción de la calle) y es obligatorio incluir advertencias sanitarias en cualquier cajetilla, algo que no siempre se cumple en las cajas de tabaco para fumar en pipa, alertó Roa.

"Fumar una hora de pipa de agua equivale a 100 cigarrillos", apuntó la directora de planificación del Minsa.

Según Roa, el problema no es solo la adicción al tabaco sino la posibilidad de que se transmitan enfermedades infecciosas como la gripe o la tuberculosis, ya que los jóvenes, en la mayoría de las ocasiones, comparten la misma boquilla.

El narguile, que en otros países se conoce como shisha o cachimba, es un dispositivo de origen oriental que se usa para fumar tabaco, especialmente con aromas frutales, y cuyo uso se ha extendido en Europa y en el continente americano.

Los "e-hookahs", "e-shisha" o "bolígrafos hookah" son sistemas electrónicos de liberación de nicotina. Estos dispositivos no tienen combustión de carbón; en su lugar se calienta eléctricamente un líquido dulce que suele contener nicotina para crear un aerosol que se inhala a continuación. Actualmente se están realizando investigaciones sobre estos dispositivos.

Históricamente, la pipa de agua (Narguile), es utilizada desde al menos cuatro siglos por las tribus indígenas de África y Asia. A finales del siglo XIX y principios del siglo XX, el consumo de tabaco en pipa de agua se hizo popular entre los hombres de edad avanzada de Oriente Medio, quienes consumían principalmente tabaco crudo y sin aromatizar, el cual resultaba repugnante a los jóvenes. Sin embargo, la introducción del tabaco aromatizado a principios del decenio de 1990 aumentó rápidamente el consumo entre la gente joven, empezando en Oriente Medio y expandiéndose después a otros países y continentes, sobre todo a través de las universidades y escuelas.