Arranca la Cumbre de Panamá
Con solo la mitad de los 22 mandatarios convocados, arrancó anoche en esta capital la XXIII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno. Enrique
Con solo la mitad de los 22 mandatarios convocados, arrancó anoche en esta capital la XXIII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno.
Enrique Iglesias, quien liderará su última cumbre como secretario iberoamericano, destacó ayer al iniciar la cumbre que Panamá es uno de los "grandes líderes" de Iberoamérica, y reconoció que tras 50 años de iniciadas las gestas de integración Latinoamericana, los países de esta región de 600 millones de personas tienen mejores democracias y están comenzando a fortalecer su nacionalismo.
"Esta es una región en el mundo que es un ejemplo de paz", enfatizó Iglesias, destacando que para el mundo, América Latina representa un mercado de 8 mil trillones de dólares.
España
En un breve mensaje grabado, el rey Juan Carlos, de España, se disculpó por no poder asistir por primera vez a una cumbre iberoamericana por haber tenido que pasar "por el taller" (fue operado).
Por su parte, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, planteó que la actual cumbre bien podría ser considerada la "Cumbre de la Reforma", pues tras 22 años de encuentros hacía falta "el nuevo impulso de una renovación" para adaptarse a la nueva escena internacional.
Además, se refirió a Panamá como un país pequeño con una tarea grande (la ampliación del Canal), y alabó su sociedad "abierta e internacionalizada".
Martinelli
Martinelli arrancó su discurso respondiendo a los señalamientos de Iglesias sobre "viajar en convoy". "A usted no lo vamos a dejar solo, usted sigue en convoy", dijo Martinelli. Dijo además que la actual cumbre debe servir para reflexionar sobre el futuro de la región.
"Si reflexionamos sobre el futuro de la cumbre, concluiremos que los países podrán encontrar a la comunidad iberoamericana una herramienta útil para desarrollarse y fortalecerse en el siglo XXI", aseveró.