Detención provisional para señalado por crimen de escolta

El segundo implicado en la muerte del escolta Jorge Nash quedó detenido provisionalmente mientras terminen las investigaciones, se trata de Cristian Alberto Aguilar Romero, de 23 años, quien vive en Ciudad Bolívar, en el sector de El Amanecer, Panamá Norte.

El joven, de tez morena, llegó esposado de pie y manos a las 8:00 a.m. al Sistema Penal Acusatorio en Plaza Ágora, vistiendo un suéter blanco con rayas en las mangas y parte frontal, así como un pantalón negro largo y chancletas cerradas de color chocolate para ser procesado ante un juez de garantías en la sala #13.

Cristian se mostraba un poco frío al comienzo de la audiencia que se inició a las 10:30 a.m., presidida por la jueza Carolina Santamaría, quien tras la identificación de las partes, procedió a realizarle algunas preguntas a Aguilar Romero, quien respondió con una voz ronca que para decir no ante una de las interrogantes del tribunal, prefería utilizar la expresión “negativo”.

Cuando la jueza dio parte al fiscal Humberto López para que hiciera las peticiones, Cristian Aguilar se agarraba de las manos y movía los pies, como si estuviera nervioso. La primera solicitud que tengo, expresó el fiscal, es que se haga la legalización de la aprehensión del indiciado, tras la captura del indiciado el 10 de diciembre en el hostal Luna Llena en Chame.

Ante esta solicitud, la defensa pública del señalado como autor del homicidio de Nash, tras supuestamente disparar, no se opuso en lo absoluto, por lo que la jueza admitió la petición del fiscal.

Detenido lloró en audiencia

Las peticiones por parte de la fiscalía continuaron, pasaron a la imputación de cargos, en esta segunda solicitud, el actuar de Cristian cambió rotundamente al escuchar cuando el fiscal López le dijo: señor Cristian Alberto Aguilar Romero, me dirijo a usted para detallarle la razón por la cual le imputaremos cargos.

Las razones empezaron a ser detalladas por el fiscal mirando fijamente a Cristian. “Los hechos ocurrieron el sábado 27 de octubre entre las 11:30 a.m. y 1:00 p.m., en la sede del Partido Panameñista en el edificio Maeli, del corregimiento de Bella Vista, cuando usted, señor Cristian, y otra persona apodada “Yuca” ingresaron a robar y dispararon contra Jorge Nash y se dieron a la fuga”, manifestó el fiscal López.

Al escuchar estas palabras, por la mejilla del procesado empezaron a correr las lágrimas, por lo que mientras quitaba la mirada del fiscal, agachó la cabeza y llevó a su rostro el suéter para secarse.

En tanto, el fiscal continuó detallando lo ocurrido, todo con base en entrevistas hechas en medio de las investigaciones que se mantienen, en la que estaban solicitando la imputación de cargos para Cristian Aguilar por los supuestos delitos de homicidio doloso agravado y robo agravado.

Ante esta petición, el abogado Agustín Vega, defensor de Aguilar, tampoco tuvo objeción alguna, por lo que la jueza Santamaría aceptó la imputación de los cargos, a lo que Cristian Aguilar volvió a llevar el suéter al rostro para lo que parecía secarse las lágrimas.

Madre quería entregar a Cristian Aguilar

La Fiscalía de Homicidios en medio de sus averiguaciones y allanamientos entrevistaron a la madre de Cristian Aguilar, quien describió lo que había pasado la mañana del sábado 27 de octubre, cuando su hijo salió de su casa, a realizar un supuesto mandado.

“Él me pidió dinero para el pasaje porque iba hacer un mandado”, manifestó la mujer a la fiscalía, pero que ese sábado no llegó en todo el día a su casa donde vivía hace 14 años, después de ella separarse de su padre.

En la mañana del domingo, Cristian Aguilar llegó con la misma ropa a su casa, la madre le sirvió desayuno y este le comentó que se iba para la casa del papá, lo que notó extraño la señora, pero no le dijo nada y accedió, según relató el fiscal López.

Días después en el barrio empezó el rumor de que “Yuca” y Cristian habían cometido el robo, esto porque en una fiesta los dos empezaron a comentar que iban a robar, pero todo les salió mal, por lo que todos esos comentarios volaron y la gran mayoría de moradores murmuraban.

Murmullo que llegó a los oídos de la madre de Cristian, quien empezó a revisar las redes sociales hasta percatarse de que las descripciones de la vestimenta de los principales señalados concordaban con la ropa que utilizó aquella mañana su hijo.

Tras conocer lo sucedido, la Sra. Romero procedió a conversar con el padre del joven para decirle que lo debían entregar por lo que había cometido, pero este se opuso y le indicó que no.

El padrastro de Cristian volvió a conversar con el padre del joven, pero seguía resistiéndose a que entregaran a su hijo, hasta que Cristian Aguilar decidió huir.

Fuga y captura del homicida

Aunque la Fiscalía de Homicidios y las unidades de la Dirección Investigación Judicial (DIJ) realizaron diversos allanamientos en la casa de los papás de Aguilar Romero, nunca dieron con su paradero.

El joven recorrió varias provincias del país, entre ellas Colón, Coclé, donde estuvo en Penonomé, y Panamá Oeste, en esta última fue capturado dentro de un hostal ubicado en el sector de Chicá en el distrito de Chame.

Cristian llegó al hostal Luna Llena el 7 de diciembre, donde alquiló la habitación #1 y no fue sino hasta el 10 en horas de la tarde, cuando se dio su captura en medio de un allanamiento que realizó la fiscalía y la DIJ.

Al instante de la captura el dueño del hostal informó que el joven portaba siempre unos binoculares, como si estuviera alerta de algo y se asomaba en la ventana de su cuarto mirando toda el área, incluso las autoridades le encontraron una cédula que no era de él, pero sí mostraba un parecido, con la que aparentemente buscaba despistar a las autoridades, ya que había una orden de captura desde que se supo que fue él quien disparó contra Jorge Nash.

El día de los hechos

El sábado, todo transcurría normal en la sede del Partido Panameñista cuando Daniel Adolfo Rivera, alias “Yuca” (ya imputado y detenido) y Cristian Aguilar ingresaron a las instalaciones y amenazaron a todos los que se encontraban dentro, apuntándolos con el arma, y procedieron a robarle.

En ese instante procedieron a neutralizar a Jorge Nash, a quien lo pusieron de rodilla, con las manos en la cabeza y, posteriormente, le pidieron que se tirara al piso, a lo que Nash accedió, pero en un descuido de los ladrones, se levantó y se abalanzó sobre uno (“Yuca”) y lo abrazó para que no se fueran.

El otro supuesto asaltante (Cristian) al notar lo ocurrido, se regresó y le hizo las detonaciones a Nash, dejándolo tirado en el piso y procedieron a huir, cruzando la vía Transístmica, unos locales comerciales, hasta llegar al edificio Ana María, muy cerca al área, donde permanecieron por más de 12 horas ocultándose de las autoridades y una vez terminó el levantamiento, los mismos se retiraron.

El fiscal Emeldo Márquez indicó que dentro de la sede del partido había 16 mil dólares que no se llevaron los delincuentes, pero que no descartan que pueda haber una tercera persona involucrada en los hechos.

Acuerdo de pena

En medio de la audiencia, el abogado Agustín Vega destacó que Cristian Aguilar quiere llegar a un acuerdo de pena y colaborar con las investigaciones, por lo que la fiscalía está analizando esta solución de alterna del conflicto.

Familiares de Jorge Nash hablan

La madre de Jorge Nash indicó a su salida del SPA, entre el llanto, que su hijo era un buen muchacho, que aún siente dolor por su muerte, por lo que espera que se haga justicia.

La tía, Estebana Nash, dijo sentirse satisfecha porque prácticamente los dos señalados han confesado ser los homicidas, por lo que espera que las investigaciones avancen de manera regular, que estarán analizando el acuerdo de pena que está pidiendo Cristian Aguilar.