Dieta de choque contra la diabetes
La diabetes de tipo 2, cuya causa subyacente suele asociarse a la obesidad, podría ser reversible mediante una “dieta de choque”. Después de conseguir sorprendentes resultados en
La diabetes de tipo 2, cuya causa subyacente suele asociarse a la obesidad, podría ser reversible mediante una “dieta de choque”. Después de conseguir sorprendentes resultados en animales de laboratorio y, posteriormente, en un reducido grupo de humanos obesos con esta enfermedad, los científicos prevén ratificar científicamente sus conclusiones en un espectro de pacientes a gran escala.
El experimento, que consiste en reducir la ingesta diaria a 800 calorías al día, a base de verduras y preparados líquidos especiales, está siendo financiado por la organización británica Charity Diabetes UK con más de 2.4 millones de euros. “Se trata del estudio más ambicioso y en el que más dinero hemos invertido. Si los resultados son positivos, tal como esperamos, el impacto sanitario será enorme”, explicaba la directora de financiación de dicha organización, Anna Morris, en un comunicado de prensa esta semana.
Atacando a la grasa de determinados órganos
El responsable del estudio, Roy Taylor, que dirige el Centro de Resonancia Magnética de la Universidad de Newcastle, explicó que en las primeras pruebas habían logrado "revertir la enfermedad y restaurar los niveles de insulina en los pacientes en un breve periodo de tiempo con una dieta de choque”. Ahora, la segunda parte del estudio se centrará en monitorizar a los pacientes para comprobar posibles efectos secundarios y descartar hipotéticas fluctuaciones en los niveles de insulina de los voluntarios de la investigación.
Si se disminuye drásticamente el porcentaje de grasa localizada en el hígado, el páncreas podrá trabajar de nuevo al máximo rendimiento. El objetivo de este régimen especial consiste en disminuir los niveles de grasa en el hígado y el páncreas. Esto es porque en las personas sanas, el hígado contiene alrededor de un 2% de grasa, mientras que en los obesos supera el 40%, por lo que, según esta investigación, podría provocar en un alto porcentaje de casos el descenso de la producción de insulina, una hormona que se segrega en el páncreas para transportar la glucosa desde la sangre a las células.
La falta de insulina produce una subida de azúcar en sangre con una serie de posibles peligrosos efectos secundarios si no se trata adecuadamente, que pueden ir desde los ataques cardiacos, los accidentes cerebrovasculares, la demencia o la ceguera. La cirugía de derivación gástrica para perder peso radicalmente ya se había asociado con anterioridad a una cierta remisión de la diabetes tipo 2, pero solo suele practicarse como último recursos debido a su peligrosidad.
¿Comemos veneno?
“Si se disminuye drásticamente el porcentaje de grasa localizada en el hígado, el páncreas podrá trabajar de nuevo al máximo rendimiento”, explica Taylor. Para comprobar que la dieta tiene efectos directos sobre este órgano determinado, los investigadores están utilizando imágenes de resonancia magnética de última generación.