Fitch reafirma calificación de Panamá, pero descarta prontas reformas a CSS
Fitch Ratings, reafirmó la calificación soberana de Panamá en BBB- con perspectiva estable, manteniendo el país su grado de inversión.
La calificación está basada en el alto ingreso per cápita, resultado de un historial de fuerte desempeño macroeconómico, caracterizado por altas tasas de crecimiento y una inflación relativamente baja, todo respaldado por la estratégica ubicación y el activo que es el Canal de Panamá.
Además se estima que Panamá tendrá un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de 9% para el 2022, lo cual demuestra una recuperación robusta luego de la contracción sufrida por la pandemia. La economía creció un 11.8% durante la primera mitad del año, potenciada por los sectores de minería y logística, y esperan un incremento económico en sectores como la construcción y el comercio minorista.
En cuanto a la deuda del Gobierno en relación al PIB, Fitch dijo que disminuirá gradualmente de 63.7% en el 2021 a 61.8% en el presente año, impulsada por la recuperación económica y la disminución del déficit fiscal.
La calificadora proyecta que el crecimiento volverá a 4.5% en 2023, por debajo de su proyección anterior de 5%, debido a que esperan una recesión leve en EEUU a mediados de 2023 y un escenario económico mundial adverso.
Sin embargo, la falta de reforma de pensiones aumenta los riesgos fiscales y destaca que para fines del 2023 se agoten las reservas del llamado sistema solidario de pensiones.
Fitch no espera que se apruebe una reforma de pensiones en el corto plazo dentro del período de administración actual que finaliza en julio de 2024. Las elecciones presidenciales, y el reciente malestar social, debilitan el apetito político por la reforma de los ajustes paramétricos.