‘Una tinaja liliputiense’
No lo podía creer. En el jardín de la casa de mis padres en Chitré observé colgando de una diminuta rama de papo (Hibiscus, de la familia
No lo podía creer. En el jardín de la casa de mis padres en Chitré observé colgando de una diminuta rama de papo (Hibiscus, de la familia Malvacaae) una perfecta tinaja de barro que no pasa de un centímetro de alto, y creo que no le caben dos gotas de agua. Pero…esa tinaja no fue hecha por manos humanas. ¡No!
He visto -no sé cuántas veces- en el campo estas pequeñas vasijas, tinajas, cántaros o como las queramos llamar, de barro. Se pueden ver debajo de algún objeto, como cuadros, debajo de una viga, en una esquina del tejado, etc. Pero en esta ocasión mi sentido de la curiosidad quedó activado al ver un objeto miniatura de barro con un pequeño agujero exactamente parecido a la típica tinaja que utilizan nuestros campesinos para mantener el agua fresca para beber. (Cuando se esclarece un acertijo, se suele decir -tan clarito como el agua de tinaja-)
Lo curioso es que siempre esas vasijas están vacías. ¿Esto qué es? ¿Quién es el arquitecto de esta maravilla de la naturaleza?
Consultamos a la entomología (ciencia que estudia los insectos) y nos ha respondido que es la "Eumenes pomiformis", (la avispa alfarera), una pequeña avispa que ha fabricado esta diminuta tinaja de barro para poner sus larvas y que estas se desarrollen en ese lugar.
Lo que hace esta supermamá avispa es moldear de tierra con sus extremidades y saliva, una diminuta habitación en forma de tinaja para colocar una larva o más, luego introduce pequeños insectos como orugas, moscas de los árboles…para que su larva al nacer pueda nutrirse y valerse por sí misma y empezar un nuevo ciclo en la naturaleza.
¿Es maravilloso esto, verdad? Esta avispa es un controlador de plagas netamente natural, favorece el equilibrio del ecosistema. Si hay muchos gusanos; la oportunidad de estas avispas es reproducirse en cantidad y así se autoregulan, si hay pocos…encontraremos pocas tinajas de barro. Esto es como nuestro comercio, si la economía es buena, todos hacen tinajas, gana el alfarero, el intermediario y quien la compra. Bueno…más o menos por ahí va la cosa.
Lo importante es prestarle mucha atención a su entorno, a la naturaleza. Podemos encontrarnos con maravillas como esta, que casi siempre pasan desapercibidas, son únicas oportunidades que nos presenta la madre naturaleza al ofrecernos cosas increíbles e impensables…abran los ojos y miren…pa’ que vean.