¡Yo rezo por la procuradora!

Un titubeante magistrado presidente interino de la Corte Suprema de Justicia, Hernán De León, negó lo denunciado por la procuradora Kenia Porcell de que le había dicho que lo habían grabado otros magistrados de la entidad, y señaló que "oraba por ella".

Minutos después de que De León apareciera en una entrevista a “TVN”, Porcell dio una conferencia de prensa frente a la Procuraduría General de la Nación, y se reafirmó en todo lo que señaló en su famoso anuncio de YouTube.

De León confirmó que sí pidió y se le concedió una conversación privada e informal en el despacho de Porcell el 30 de julio, pero negó a entrar en el contenido de esa conversación, alegando que eso viciaría su trabajo como magistrado.

Según De León, esa visita era con el propósito de "establecer lazos de mayor comunicación entre el MP y el Órgano Judicial", en sentido de ponerla en conocimiento sobre "las debilidades del sistema".

Tanto él como Porcell confirmaron que trabajaron juntos en la Sala Quinta, y luego como asistentes de los magistrados Graciela Dixon y el fallecido Rogelio Fábrega Zarak.

Según De León, él y Porcell mantenían una "amistad profesional" y que incluso había visitado a la procuradora en su casa, cosa que luego ella negó.

Pero cada vez que el periodista Eduardo Lim Yuen lo cuestionaba sobre elementos como que supuestamente lo habían pinchado, y que se iba a caer el caso Martinelli, el magistrado aludía a que debe mantener el secreto de la conversación por su condición de magistrado, y que no quería "echarle gasolina" a un tema tan delicado.

"Yo caería en la misma falta de imprudencia de la procuradora, que la respeto, caería en una falta de prudencia", sostuvo, al tiempo que afirmó que no ha escuchado el video en YouTube de Porcell.

"Hay que medir las consecuencias. Tras que hay una crisis en la administración de justicia, una noticia de esta naturaleza va a golpear al país, las inversiones, todo". Además, dijo que entre lo que habló Porcell en YouTube hay "elementos de falsedad".

Sobre si es cierto que él usa al magistrado José Ayú Prado, y este lo usa a él, respondió: "yo creo que todos los magistrados nos usamos en el sentido ético".

También confirmó como cierta la descripción dada por Porcell de que es un hombre que busca al "Santísimo", señalando "soy un hombre de Dios. Yo oré por ella ayer, y le pedí a Dios que la perdone, porque eso es lo que necesita Panamá, paz".

En el tema de si lo grabaron, De León enfatizó que "no le consta" que eso hubiese ocurrido, ni de parte del expresidente Ricardo Martinelli, ni del presidente Juan Carlos Varela, ni de ninguno de sus colegas en la CSJ, ni de la propia procuradora Porcell. "No me consta ningún tipo de grabación, ni extorsión, ni presión, ni coacción".

Tampoco ve por qué debería declararse impedido en el caso pinchazos, agregando que para tranquilidad de la sociedad, del usuario del sistema de justicia, de los jueces y magistrados transparentes, mantendrá sus mismos criterio jurídicos a la hora de sus fallos, apegado a la Constitución y la ley.

¿Y el caso de los 5 mil, y la mujer desnuda frente al computador? De León se salió con que esas menciones las hizo hablando "metafóricamente".

"Era una conversación informal. Diciendo hay 5 mil pinchados en este país, hay mujeres desnudas. No es una conversación formal, es lenguaje criollo".

De León dijo que tras 6 años como magistrado y nunca tener escolta, al día siguiente de las declaraciones de Porcell, vio un auto frente a su residencia tomando fotos, por lo que tuvo que pedir seguridad.

Porcell riposta y reitera lo de la mujer desnuda

Apenas terminó la entrevista con TVN, ya se estaba anunciando la respuesta de Porcell, que ahora no fue en YouTube, sino en las afueras de las escalinatas de la Procuraduría.

Según Porcell, De León llegó a su despacho "temeroso y asustado", diciendo que "se va a caer" el caso Martinelli, que lo grabaron, que había un caso de 5 mil pinchados, que había dos expedientes de pinchazos en EE.UU. e Italia, y que vio a una mujer desnuda de la cintura para arriba frente a un computador.

"La grabación debe haber sido demasiado grave", expresó Porcell, quien dijo sarcásticamente y ensayando una sonrisa, que a lo mejor el magistrado "tiene miedo".

Que se ponga los pantalones

"Yo no tengo por qué mentir. Lo más importante es que yo cumplí y él es una víctima porque él fue grabado", reiteró. "Hay expresiones que nunca voy a olvidar... Él está mintiendo, y lo digo de manera frontal".

También negó haber grabado la conversación con De León, porque "desde que yo soy procuradora no se graba a nadie".

Al finalizar, le pidió a De León que ponga la denuncia, y le envió un mensaje directo. "Haga gala de género y asuma la responsabilidad, y yo le digo que uno es valiente hoy, y mañana y uno no juega a decir que es valiente y que sus actos son lo contrario".