Opinión - 12/9/13 - 11:12 PM

Comprender

Llegué a enseñar a la Universidad de Panamá hace 41 años, subía las escaleras corriendo, lleno de vitalidad. No me apoyaba de las barandas porque no tenía

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Milcíades Ortiz / Catedrático

Llegué a enseñar a la Universidad de Panamá hace 41 años, subía las escaleras corriendo, lleno de vitalidad. No me apoyaba de las barandas porque no tenía miedo a caerme. Con el paso de los años y la inevitable vejez, ahora subo con precaución para evitar una caída que pueda afectar mis huesos viejos. Confieso que a veces me falta algo de aire si hay muchos escalones.

Digo a mis alumnos que cuando uno es joven nunca piensa ni se prepara para la vejez. Algunos jóvenes no comprenden la realidad de las personas con edad, tienen una actitud de burla que no se justifica y que los hiere.

Hace poco un joven casi me tumba. Quería lucirse subiendo las escaleras de la U como si escalara una montaña. Como suele ocurrir más de la cuenta, el joven demostró que no tiene ninguna educación. A lo mejor no fue criado con el “Manual de Buenas Maneras” del Sr. Carreño. Sugería respeto entre adultos y jóvenes para una buena convivencia social y familiar.

Me duele cuando me entero de nietos irrespetuosos que se burlan de su abuela. Ella comía y como le faltaban algunos dientes se salían pedacitos de la boca. Como hemos sido educados con valores, no aceptamos costumbres de los jóvenes "modernos". Mi madre (q.e.p.d.) nunca vio con buenos ojos que jovencitos novios estuvieran solos en una habitación... sin supervisión de mayores. Menos la forma de vestirse de chiquillas, que "no dejaban nada a la imaginación".

Si el anciano se la pasa hablando de su época, dirán que está enfermo de la mente. No piensan que varios gustan de recordar esos días porque los hace vivir el pasado. La soledad afecta a muchos mayores. Duele vivir sabiendo que sus amigos y conocidos ya se fueron. No les extrañe que los familiares no tengan tiempo para satisfacer uno que otro deseo de sus ancianos. Recuerdo aquella dama cubierta con medias y abrigo de lana... en pleno mediodía. Juraba que sentía frío. Más de uno se reía de su "ocurrencia".

Resulta que con los años la circulación de la sangre no es igual en todo el cuerpo. Las extremidades no reciben el nivel de sangre que antes... ¡y eso hará que sientan frío! Con los adelantos médicos las personas vivirán más años. La cantidad de ancianos aumenta en todo el mundo y los familiares deben comprenderlo.

Hay culturas como la asiática donde respetan a los de la tercera y cuarta edad. Como no somos chinos... pues...


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