Historia

C uando estudié Sociología en Chile a finales de los años sesenta del siglo pasado, encontré algunos compañeros que querían burlarse de mí porque era "centroamericano". Lo primero fue que varios me hablaban en inglés. Extrañado pregunté ¿por qué? Reídos me explicaron que como Panamá era una "colonia yanki", yo tenía que hablar inglés. Después de decirles varios insultos "a lo panameño" les expliqué que Chile era más colonia gringa que mi país. Sostuve que había leído que el presupuesto chileno dependía mucho de los dólares, cosa que no sucedía en mi país.

"Cada mina y negocio de los EE.UU. son aquí pequeñas 'zonas del Canal', señalé, y dejaron de vacilarme con el inglés. En otra ocasión me llamaron mentiroso porque dije que en Panamá los pobres que vivían en casas improvisadas, sin servicio higiénico... tenían artículos de lujo como componentes, televisión, etc. Tuve que llevarles un libro con una investigación del Instituto de Vivienda para que supieran que era cierto. Tampoco aceptaron que nuestros obreros comían carne todos los días, algo que allá no se podía por lo cara que estaba.

La libre circulación del dólar y los artículos finos como perfumes franceses y licor inglés molestaban a más de uno. Pero lo que más me afectó fue cuando ocurrió el golpe de Estado en Panamá. Me gritaron que en mi país "había un golpe militar cada dos meses", que nadie respetaba la Constitución, etc. Hasta un doctor en Sociología de Polonia (comunista) indicó que era lógico que defendiera a mi patria con falsedades. Le indiqué que en Chile también podría ocurrir un golpe militar. ¡Para qué fue eso! Insultos, burlas, risas recibí de mis compañeros.

Argumenté al profesor que un sociólogo no podría decir que nunca ocurriría algo en un país, porque las circunstancias pueden cambiar. El argumento que me restregaron en la cara fue que los militares chilenos eran democráticos, fieles cumplidores de la Constitución. Unos tres años después se cumplió lo dicho por mí. Chile fue víctima del peor golpe de Estado contra el gobierno socialista-comunista del Dr. Salvador Allende. Por muchos años imperó una dictadura férrea, que mató a muchos opositores.

Todavía hoy se juzga a los militares torturadores y asesinos, aunque tengan ochenta años. Todo esto es historia. Lo cierto es que el experimento izquierdista de Allende fracasó. Ahora Chile es el país con la mejor economía de la región, gracias al llamado "capitalismo salvaje".