Infiernillo político

Bueno, bueno, la política es un arte comunicativo que busca persuadir a las personas para reclutarlas a favor de una persona, un partido o una propuesta, o a rechazarlos, por lo cual se basa en el impacto emocional dado que explota la sensibilidad y la pasión de la gente.

Por cierto que ello implica un bien elaborado plan de campaña con su estrategia que lo blinde de cometer errores, porque estos pueden afectar la acción proselitista o producir una reacción negativa.

De paso en nuestra campaña electoral se han cometido algunos errores que, de no ser corregidos pueden frustrar las aspiraciones de candidatos y partidos.

Tomemos por ejemplo al candidato del PRD, el mayor partido en membresía del país, Juan Carlos Navarro, quien ha dejado en la figura de su vicepresidente Gerardo Solís el peso de la campaña y la agresividad discursiva.

Además, su liderazgo que unifique las distintas facciones partidarias (encerrado en un círculo íntimo) queda expuesto cuando el expresidente Ernesto Pérez Balladares públicamente demostró que mantiene el liderazgo, sentando a todos a la mesa, al menos publicitariamente, para demostrar que llegan unidos a las elecciones.

En el caso del candidato panameñista, Juan Carlos Varela, otro opositor, su figura política queda desplazada por el activismo de su esposa Lorena Castillo, quien se lleva el protagonismo de la campaña electoral.

Esto sumado al lenguaje violento de su hermano, lo coloca como figura gris, sin liderazgo.

Luego el candidato oficialista José Domingo Arias, a quien la aplastante figura del presidente Ricardo Martinelli lo opaca

Además, su irreflexiva declaración de que trabajará con el Gabinete del actual mandatario, le da al discurso opositor el punto de que él es una simple figura representativa del jefe del Ejecutivo.

Finalmente, el candidato del FAD, Genaro López, quien se pretende presentar como algo fuera de la política tradicional, comete el error de no buscar ampliar su base de apoyo y se rodea de su gente de Suntracs o Frenadeso, y no capta votos fuera de su entorno.

Respecto de los candidatos independientes, su error es no contar con una organización política a nivel nacional.

El filósofo chino Confucio proclamo: El hombre que ha cometido un error y no lo corrige comete un error mayor.

Bueno, eso es todo por hoy, pero tranquilos, que el próximo jueves habrá más.