Protestas en el Instituto Nacional
La educación comienza por casa. Los padres deben hablar con sus hijos y explicarles que hay formas civilizadas de protestar. Lanzar piedras a diestra y siniestra, no es una forma correcta
La Policía Nacional arrestó ayer a 59 alumnos del Instituto Nacional en medio de protestas violentas, pero las autoridades deben evitar que los uniformados ingresen a las instalaciones educativas.
El Ministerio de Educación, padres de familia, docentes y el personal administrativo del plantel debe establecer mecanismos para orientar a la juventud y evitar situaciones que escapen del control y se tenga que recurrir a la represión de los antimotines.
La educación comienza por casa. Los padres deben hablar con sus hijos y explicarles que hay formas civilizadas de protestar. Lanzar piedras a diestra y siniestra, no es una forma correcta.
Pero el Ministerio de Educación, también debe medir los mecanismos a los que recurre para contener a los estudiantes revoltosos.
Es cierto que hay estudiantes que pueden estar influenciados por las bandas y pandillas, pero el esfuerzo de las autoridades deben ser rescatarlos, más que reprimirlos.
Al final del camino, la represión no corrige a los que andan por caminos torcidos. Mejor beneficio para el Instituto Nacional, para el país y para la propia familia, es que los autoridades del colegio busquen a los acudientes de esos chicos e iniciar en conjunto una labor de corrección de esas conductas, de lo contrario ese tipo de estudiantes que hoy recurre a la violencia, mañana será carne de presidio y una carga para la sociedad.