Alerta por mal tiempo
Las fuertes lluvias registradas la tarde y noche del martes en los corregimientos de Progreso, en el distrito de Barú, y Nuevo Méjico, en Divalá, y Alanje, todos en la provincia de Chiriquí dejaron afectaciones en diferentes viviendas de estos sectores producto del desbordamiento de algunos ríos.
Al menos unas 17 viviendas resultaron afectadas en las comunidades de Almendro, Acueducto y Progreso, una en Chuhupaté, adicional a tres más en Palmito Viejo, por el desbordamiento de algunas quebradas en el lugar tras la crecida del río Colorado, procedente de Costa Rica.
Mientras, en este sector de Nuevo Méjico, en el corregimiento de Divalá, las inundaciones que se dieron afectaron al menos a unas 20 familias, a las cuales el agua subió dentro de las viviendas casi un pie de altura tras el desbordamiento de río Gariché.
En el albergue de Nuevo Méjico se mantienen 10 familias refugiadas debido a las inundaciones, a las cuales ya se les dio alimentos, frazadas y otros enseres.
La Fuerza de Tarea Conjunta, liderada por personal del Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc), con el Senafront, Senan, Cruz Roja y Cuerpo de Bomberos, desplegó personal y realiza monitores en estas áreas debido a que, a pesar de que la marea en el Pacífico se mantiene baja, se han registrado este tipo de afectaciones, por lo cual se ha tomado en cuenta el aviso de mareas altas en los próximos días.
Más de 30 viviendas resultaron afectadas por el desbordamiento de estos dos ríos, y el mal tiempo persiste en el lugar.
Francisco Santamaría, director regional de Sinaproc en Chiriquí, señaló que se mantiene el monitoreo en el sector de Cerro Punta debido a las lluvias que se registran en la zona, ya que en años anteriores en el área se han dado grandes afectaciones.