Sucesos - 02/6/14 - 12:39 AM

Avanzan investigaciones por asesinato

Milciades Romero Juárez está en calidad de aprehendido, investigado por el crimen de su pareja sentimental, Silvia Elizabeth Rodríguez, a la que supuestamente enterró en el terreno

Grisel Bethancourt Crítica

Milciades Romero Juárez está en calidad de aprehendido, investigado por el crimen de su pareja sentimental, Silvia Elizabeth Rodríguez, a la que supuestamente enterró en el terreno de un minisúper en Nueva Esperanza, en Pacora.

La Unidad de Homicidios de la Fiscalía Auxiliar de la República ha tomado declaraciones a varias personas que servirán como testigos de ese macabro hecho.

Las menores hijas de Silvia también dieron sus declaraciones y están siendo atendidas en la oficina de Asistencia a Víctimas, donde son tratadas psicológicamente.

El hombre, principal sospechoso, se mantiene como detenido por ese caso, comentó una fuente consultada.

Asesinato

Silvia, una mujer de 32 años, es la víctima número veinte y la 17 por el delito de feminicidio que se da en el país, según el Observatorio de la Defensoría del Pueblo.

Tenía 20 días de desaparecida, y en los alrededores de la residencia, ubicada en Nueva Esperanza Arriba, ya había olores nauseabundos.

Fue el propio Milciades Romero Juárez quien al verse acorralado por la presencia policial en su residencia dijo dónde estaba el cuerpo de su pareja, enterrado.

Tres niñas: de 7, 9 y 14 años, quedaron huérfanas; el hombre las tenía engañadas, les decía que su progenitora se había ido para el interior, de donde era oriunda.

Hubo una discusión, según narró una testigo, mientras se notaban actitudes sospechosas e inusuales del padrastro Romero Juárez para con dos de las menores más grandes.

Las niñas lloraban, esperando a su madre, pero no había respuesta.

El cuerpo de Silvia fue encontrado y se menciona que el hombre le había disparado.

La necropsia determinará la causa de muerte de la víctima.

Las niñas quedaron a órdenes de un juzgado de niñez y adolescencia.

El agresor es investigado por la manipulación a las menores y por otros delitos contra las niñas.

Dos de las hijas de Silvia iban a la escuela primaria, mientras que la adolescente no estaba asistiendo a su centro escolar.

El sospechoso tiene 23 años de edad y trabajaba como vendedor en una empresa cuando fue capturado por la DIJ y la DIP de la Policía Nacional.

La Unidad de Homicidios estaba ayer, domingo, en plena toma de declaraciones de varios testigos.

El Estado panameño adoptó todas las medidas jurídicas encaminadas a garantizar la igualdad de género y contra el delito de feminicidio.

Las modificaciones implican la pena máxima de 30 años para los culpables.


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