Existe un testigo por desaparición y crimen de adolescentes de Panamá Oeste
Ningún grupo criminal en Panamá ha sido tan violento, en la última década, pero con la desaparición de tres menores y el crimen de otro, el grupo
Amenaza
Son sacados
La pandilla de Bagdad obligó a los integrantes de El Pentágono a salir del pabellón donde convivían, de no hacerlo, serían asesinados.
Ningún grupo criminal en Panamá ha sido tan violento, en la última década, pero con la desaparición de tres menores y el crimen de otro, el grupo se dividió en tres pandillas.
Hace 15 días desaparecieron tres adolescentes entre 13 y 17 años, en Panamá Oeste, y fue asesinado otro en Alcalde Díaz, esa situación cambió el panorama pandilleril en el país.
En principio, las autoridades investigaron los casos como hechos aislados, pero con la obtención de un testigo se confirmó que están relacionados.
La muerte a tiros del menor surgió por la desaparición de los tres adolescentes, dijo el testigo. Esa noche también él iba a ser eliminado, pero logró escapar.
Se trata de diferencias surgidas entre las pandillas de Bagdad y El Pentágono.
Una de las víctimas es el sobrino del jefe de la pandilla El Pentágono y tras el hecho, los integrantes del grupo criminal se vieron en la obligación de abandonar el Pabellón N.° 14 de la cárcel La Joya. Ellos vivían con la gente de Bagdad, pero salieron de problemas porque los responsables de las desapariciones, supuestamente, son miembros de esta banda.
Historia pandilleril
A inicios del siglo 21, la Unidad Antipandilla de la Policía Nacional manejaba información de que existían varias grupos delincuenciales que operaban en el país. Las cifras entonces rondaba en 108 pandillas a nivel nacional, cantidad que aumentó a 250 en la actualidad.
Por años se pensó que actuaban solas y que existían rivalidades entre sí y en algunos casos operaban mancomunadamente, pero luego de aumentar su capacidad económica, la situación cambió de forma radical. Empezaron a hacer alianzas y declaraciones de guerras a otros grupos que eran fuertes, sin embargo, estos últimos rehusaron unirse a otras bandas y terminaron siendo eliminadas por sus enemigos.
Dado su poderío de violencia, entonces surge la organización criminal más sangrienta que hasta el momento ha existido en el país, “La Unión Soviética” la cual, hasta hace una semana estaba conformada, por las pandillas Bagdad, El Pentágono y MOM, esta última significa Matar o Morir.
La sede original de Bagdad fue el corregimiento de El Chorrillo, pero en la actualidad tiene ramificaciones en Panamá Oeste y el resto del país. Mientras que El Pentágono, en Santa Ana, y MOM, en el corregimiento de Curundú.
La hegemonía de “La Unión Soviética” quedó a cargo de Bagdad.
Los jefes de El Pentágono y MOM fueron asesinados y solo Bagdad continúa con su líder original.
Tras los homicidios de los otros cabecillas, sus organismos quedaron en manos de delincuentes que no han tenido las mismas relaciones criminales en el extranjero, situación que los ha debilitado a nivel de militancia.
“La Unión Soviética” se encargó de eliminar a pandillas como Los Chicanos, Los Niños de la Tumba Fría, Marco Policías, Los Bebés, y otros grupos de tumbadores que no tenían una pandilla en sí, más bien actuaban dependiendo de los enemigos que surgían de su actividad ilícita.
Al sentirse acorralados, los sobrevivientes de las pandillas, que en teoría eran consideradas más vulnerables, se aliaron y formaron la organización criminal denominada Calor Calor, que tiene un nivel de beligerancia igual o quizás mayor a la de “La Unión Soviética” en la actualidad.
Ambos grupos delincuenciales se han dedicado al trasiego de droga, venta de armas y sicariato, como principales formas de obtener ingreso y garantizar su subsistencia.
A pesar de las muertes de dos de los jefes de las pandillas MOM y El Pentágono, “La Unión Soviética” continuó con su propósito de controlar la venta al menudeo de la droga a nivel nacional, pero en el camino se ha encontrado con una piedra en el zapato: Calor Calor. Ambos grupos han dado inicio a una nueva era de la violencia, en la que solo se habla de dos pandillas en guerras, Bagdad o Calor Calor, los que están con una o con la otra. No importa si se escuchan otros nombres, las órdenes de los robos de droga y ejecuciones se dan con el consentimiento de sus jefes.