Llamado a la consciencia
Más allá de las regulaciones existentes sobre la venta de artefactos pirotécnicos, está el hecho de la consciencia que tengan quienes los comercializan ilegalmente y de quienes
Más allá de las regulaciones existentes sobre la venta de artefactos pirotécnicos, está el hecho de la consciencia que tengan quienes los comercializan ilegalmente y de quienes los compran para que sean manipulados por menores de edad, punto en el que se pueden producir tragedias que empañen las fiestas de fin de año, igual que el no cumplir con las medidas de seguridad puede causar incendios, debido a pirotecnia mal almacenada.
Carlos Prosperi, jefe de la Dirección Institucional de Asuntos de Seguridad Pública (Diasp), del Ministerio de Seguridad Pública (Minseg), señaló que la entidad bajo su cargo es la responsable de emitir los permisos de venta de pirotecnia a locales comerciales, luego de cumplir una serie de requisitos que hagan apto el local para este tipo de actividad. Sin embargo, Prosperi llama a la ciudadanía a tomar consciencia del riesgo que representan estos artefactos, como objetos de uso y venta legal cuyos resultados al ser mal utilizados no son nada agradables.
Explica el funcionario que el tema de pirotecnia no es exclusivo de las fiestas de diciembre, puesto que últimamente se usa la misma en toda actividad que represente alegría. En este mes el tema cobra mayor vigencia.
Locales deben cumplir requerimientos
Prosperi indicó que los locales que deseen vender fuegos artificiales deberán contar con la debida señalización del sitio de venta (salidas de emergencia y prohibiciones de uso), extintores, alarmas contra incendio, seguros y un local con la estructura adecuada, entre otras cosas.
Una vez cumplida esta parte, se realizan inspecciones para verificar que se cumplan las obligaciones. Destaca que los comerciantes no se oponen a los requisitos, pero encuentran de igual forma muchos que son inspeccionados y no cumplen. Las inspecciones sorpresa continuarán todo el mes, a nivel nacional.
Los bomberos, la Policía Nacional y el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) realizan junto a la Diasp estas inspecciones.
Este año, como novedad, se les exige a los comercios entregar con la venta una volante informativa a los clientes sobre los riesgos y prohibiciones que conlleva el uso de fuegos artificiales.
Los permisos para venta de estos artefactos se promedian entre 220 y 250 por año, pero aumentan anualmente, aseguró la fuente.
Sanciones
El director aseveró que la venta de estos productos está prohibida para vendedores ambulantes y buhoneros. Sin embargo, por ahora, solo se decomisa la mercancía si un local no cumple con las regulaciones o se encuentra a personas vendiendo ilegalmente.
Al respecto, la Diasp tiene un proyecto que presentará al ministro José Raúl Mulino en el que se establecen, por decreto ejecutivo, sanciones más enérgicas. El documento, reveló Prosperi, tiene un 90% de avance y deberá ser presentado al despacho superior del Minseg a más tardar en febrero de 2014.
Se desconoce si hay alguna legislación vigente que trate esta materia, y se va a investigar para evitar conflictos posteriores.
Prosperi lamentó que no haya el pie de fuerza suficiente para detectar a cada vendedor ilegal de bombitas y otros, por lo que reiteró el llamado a la ciudadanía, tanto a quienes comercializan en semáforos y puestos en la calle, como a quienes muchas veces por comodidad los compran, para evitar que los artículos vayan a parar a manos de menores de edad, a quienes primordialmente se busca proteger.
La Diasp
La entidad en mención se encarga de regular, además de a quienes vendan pirotecnia, a las agencias de seguridad, el porte de armas de fuego y el uso de explosivos controlados en áreas de construcción, entre otros.