Bisturí que ayuda a contrarrestar el cáncer
El cáncer es una de las enfermedades que causan más muertes en el mundo, pero las estadísticas podrían cambiar gracias a los nuevos inventos en salud.
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El cáncer es una de las enfermedades que causan más muertes en el mundo, pero las estadísticas podrían cambiar gracias a los nuevos inventos en salud.
La ciencia está superavanzada, por lo que un bisturí experimental puede ayudar a los cirujanos a asegurarse de que han retirado todo el tejido canceroso, reportaron médicos europeos. Explican que por lo general los cirujanos tienden a utilizar bisturíes que calientan el tejido mientras cortan, produciendo un humo muy oloroso. El nuevo bisturí analiza el humo y puede señalar instantáneamente si el tejido es canceroso o sano.
El periódico “El Informador” señaló que los cirujanos tienen que enviar el tejido a un laboratorio y esperar los resultados.
El doctor Zoltan Takats, del Imperial College de Londres, sospechaba que el humo producido durante cirugías por cáncer podría contener algunas pistas importantes sobre la presencia de esa enfermedad, por lo que diseñó el bisturí "inteligente", que se conecta a un aparato de espectrometría de masas del tamaño de un refrigerador, el cual analiza el humo de tejido cauterizado.
El humo detectado por el bisturí inteligente es comparado con una biblioteca de sellos de humos de tejidos cancerosos y no cancerosos. Si la información que aparece en el monitor es de color verde significa que el tejido está sano, roja que es canceroso y amarilla que no ha sido identificado.
Cada una de las muestras enviadas al laboratorio para saber los resultados tarda alrededor de 30 minutos recibir una respuesta en los mejores hospitales, sin embargo, aún así los médicos no pueden estar absolutamente seguros, por lo que a menudo retiran un poco más de tejido del que consideran estrictamente necesario.
Si el resultado es que permanecen algunas células cancerosas, los pacientes podrían requerir otra cirugía o someterse a tratamiento de quimioterapia o radiación.
El nuevo bisturí y aparatos que lo acompañan fueron fabricados a un costo de 380 mil dólares, pero científicos dijeron que este probablemente disminuiría si es comercializada la tecnología a nivel mundial.
Cabe resaltar que actualmente el tratamiento más común para el cáncer que involucra tumores sólidos consiste en extirparlos quirúrgicamente.
Científicos probaron el bisturí nuevo en tres hospitales entre 2010 y 2012. Se tomaron muestras de tejido de 302 pacientes para crear una base de datos sobre qué tipo de humo indica la presencia de cáncer, incluido de cerebro, pecho, colon, hígado y estómago.
Según sus creadores en un futuro el bisturí podría ser utilizado para otros fines, como identificar tejido con deficiente suministro de sangre y los tipos de bacterias presentes.