Buena comunicación y educación evitan malas conductas
Hace unos meses en Colombia y Perú, los padres de familia quedaron alarmados por el baile o “juego” que impusieron los adolescentes, llamado el “carrusel sexual”.
Hace unos meses en Colombia y Perú, los padres de familia quedaron alarmados por el baile o “juego” que impusieron los adolescentes, llamado el “carrusel sexual”.
La alarma se dio porque producto de este juego, varias jóvenes quedaron embarazadas, y según el relato de una de las menores en estado de gestación, el juego consiste en que realizan una rueda y en medio de la música y el baile las parejas se penetran e intercambian, pero cuando alguno eyacula, pierde y sale del juego.
Tras esta preocupante situación, hablamos con expertos para tomar medidas y evitar que en nuestra juventud se dé este tipo de conductas. La psicóloga Diana Poveda expresa que estas conductas se dan por la pérdida de valores y la baja autoestima, trayendo como principales consecuencias embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual.
Este tipo de baile es considerado como un comportamiento que podría ser influenciado por sus amigos y compañeros de clases, por lo que es probable que el joven no llegue a comprender las consecuencias por el uso del alcohol y drogas.
“La adolescencia y la juventud son etapas turbulentas que deberían darse en un contexto ambiental de estabilidad familiar y social; sin embargo, en las últimas décadas, la familia y la sociedad también han sufrido cambios algo turbulentos, que dificultan el logro de las expectativas de bienestar y calidad de vida de las comunidades”, dijo Poveda.
Recomienda a los padres hablar con sus hijos manifestándoles las consecuencias de este tipo de juegos, brindarles más afecto, darles responsabilidades y buscar poco a poco esos elementos que le ayudará a cada uno a madurar y saber tomar sus decisiones y sobre todo enseñarlos a decir no cuando algo atenta contra su salud y bienestar.
El sociólogo Milciades Ortiz manifestó que parte de ese comportamiento se da por la pérdida de valores, definiciones incorrectas del amor, poca importancia al matrimonio, mucha influencia del sexo en el crecimiento del niño.
“Las relaciones sexuales en algunos sectores de la sociedad han perdido su sentido relacionado con la actividad amorosa, puesto que antes el sexo era lo último en una relación”, expresó.
En este caso asegura que no es recomendable echarle la culpa al joven, ya que es una situación actual de pérdida de valores, haciendo que el sexo se convierta en una ganancia o deporte, debido a la poca importancia que la sociedad le da.
Aconseja reforzar la educación sexual y los valores de la relación íntima.
En cuanto al tema, también entrevistamos a la profesora Dania Sandoval, quien asegura que esta conducta viene como consecuencia de presión de grupo y la necesidad de ser visible.
“Además de embarazos no deseados, pueden presentarse otras consecuencias como enfermedades de transmisión sexual y sida, que a la vez trae consigo poco rendimiento en la educación, afectaciones en la parte afectiva, cognitiva y psicomotora; en la que su desarrollo no será normal ni coherente, dando origen a crisis depresivas, por lo tanto, la educación y formación del joven no será saludable ni acertada, y este proceso de aprendizaje se dará por un camino tortuoso y difícil donde serán señalados por la sociedad”, enfatizó.
Dania aconseja que las escuelas tengan programas con talleres, dinámicas, actividades individuales o grupal, a la vez que se cuente con un gabinete psicopedagógico en cada centro educativo y que los educadores se capaciten más.