Colombia revive a Gabo con lectura de "El coronel no tiene quien le escriba"
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, fue el encargado de abrir esta lectura pública "sin fin" en el auditorio Germán Arciniegas de la Biblioteca Nacional de Bogotá, ante más de un centenar de seguidores del Nobel que tenían cada uno un ejemplar de la novela y una rosa amarilla.
Bogotá
EFE
Colombia revive hoy la obra de su Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez, con ocho horas de lectura pública de una de sus más conocidas novelas "El coronel no tiene quien le escriba" en bibliotecas, colegios y terminales de transporte de todo el país.
Los homenajes al escritor, periodista y guionista colombiano no cesan sino que, casi una semana después de su fallecimiento en Ciudad de México, reivindican la inmortalidad de su obra con ocasión del Día del Libro y el Día del Idioma.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, fue el encargado de abrir esta lectura pública "sin fin" en el auditorio Germán Arciniegas de la Biblioteca Nacional de Bogotá, ante más de un centenar de seguidores del Nobel que tenían cada uno un ejemplar de la novela y una rosa amarilla.
"El coronel destapó el tarro de café y comprobó que no había más de una cucharadita. Retiró la olla del fogón, vertió la mitad del agua en el piso de tierra, y con un cuchillo raspó el interior del tarro sobre la olla hasta cuando se desprendieron las últimas raspaduras del polvo de café revueltas con óxido de lata", comenzó a leer el mandatario colombiano.
"El coronel no tiene quien le escriba" (1961) narra la historia de un ingenuo militar en retiro cuyo nombre nunca llegamos a conocer, que luchó en la Guerra de los Mil Días y que amanece cada día esperando un cheque de su pensión que nunca llega.
A Santos le siguieron su esposa, María Clemencia Rodríguez; la ministra de Cultura, Mariana Garcés; la viceministra María Claudia López, el editor Conrado Zuluaga y Jaime Abello, director de la Fundación de Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI) que fundó el Nobel en Cartagena.
La directora de la Biblioteca Nacional, Consuelo Gaitán, recordó las tardes lluviosas que pasó García Márquez leyendo en sus salas cuando estudiaba Derecho en Bogotá, en la década del cuarenta.
Pero no fue ese el único escenario en el que estudiantes y seguidores del escritor se sumaron a la lectura pública, pues la emblemática biblioteca Virgilio Barco de Bogotá acogió también la iniciativa en un auditorio en el que proyectaron el discurso que ofreció Gabo cuando recibió el Nobel en 1982.
El Ministerio de Cultura ha repartido 12.000 ejemplares de "El coronel no tiene quien le escriba" en las 1.400 bibliotecas públicas del país y las principales estaciones de TransMilenio, el sistema de transporte articulado masivo de la capital, que han puesto en marcha esta jornada llamada "Gabolectura".
Por su parte, el Instituto Distrital de las Artes de Bogotá y Transmilenio también pusieron en marcha una iniciativa por el Día del Libro y distribuyeron unos 8.000 ejemplares en portales de TransMilenio.
Al mismo tiempo en Aracataca, el pueblo del caribe colombiano que vio nacer a García Márquez hace 87 años, la ministra de Educación, María Fernanda Ocampo, presentó el programa "Gabo vive en la escuela", que consistirá en la entrega de 12.654 audiolibros del Nobel a 4.218 escuelas para niños con necesidades especiales.
Este material, basado en los libros del escritor colombiano "Doce cuentos peregrinos", "El amor en los tiempos del cólera" y "Cien años de soledad", llegará a las instituciones educativas entre junio y julio.
Ocampo y los niños de las escuelas de Aracataca también participaron en la lectura simultánea y los alumnos escribieron en cientos de mariposas amarillas de papel cómo quieren que sea su país en el futuro.
Este homenaje a través de la lectura sigue al realizado ayer en la Catedral Primada de Bogotá, una ceremonia cargada de solemnidad, música sacra y funcionarios, y al que acogió Ciudad de México el pasado lunes, en el que participaron miles de personas, incluidas la familia del Nobel, Santos y su colega mexicano, Enrique Peña Nieto. EFE
EFE
Colombia revive hoy la obra de su Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez, con ocho horas de lectura pública de una de sus más conocidas novelas "El coronel no tiene quien le escriba" en bibliotecas, colegios y terminales de transporte de todo el país.
Los homenajes al escritor, periodista y guionista colombiano no cesan sino que, casi una semana después de su fallecimiento en Ciudad de México, reivindican la inmortalidad de su obra con ocasión del Día del Libro y el Día del Idioma.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, fue el encargado de abrir esta lectura pública "sin fin" en el auditorio Germán Arciniegas de la Biblioteca Nacional de Bogotá, ante más de un centenar de seguidores del Nobel que tenían cada uno un ejemplar de la novela y una rosa amarilla.
"El coronel destapó el tarro de café y comprobó que no había más de una cucharadita. Retiró la olla del fogón, vertió la mitad del agua en el piso de tierra, y con un cuchillo raspó el interior del tarro sobre la olla hasta cuando se desprendieron las últimas raspaduras del polvo de café revueltas con óxido de lata", comenzó a leer el mandatario colombiano.
"El coronel no tiene quien le escriba" (1961) narra la historia de un ingenuo militar en retiro cuyo nombre nunca llegamos a conocer, que luchó en la Guerra de los Mil Días y que amanece cada día esperando un cheque de su pensión que nunca llega.
A Santos le siguieron su esposa, María Clemencia Rodríguez; la ministra de Cultura, Mariana Garcés; la viceministra María Claudia López, el editor Conrado Zuluaga y Jaime Abello, director de la Fundación de Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI) que fundó el Nobel en Cartagena.
La directora de la Biblioteca Nacional, Consuelo Gaitán, recordó las tardes lluviosas que pasó García Márquez leyendo en sus salas cuando estudiaba Derecho en Bogotá, en la década del cuarenta.
Pero no fue ese el único escenario en el que estudiantes y seguidores del escritor se sumaron a la lectura pública, pues la emblemática biblioteca Virgilio Barco de Bogotá acogió también la iniciativa en un auditorio en el que proyectaron el discurso que ofreció Gabo cuando recibió el Nobel en 1982.
El Ministerio de Cultura ha repartido 12.000 ejemplares de "El coronel no tiene quien le escriba" en las 1.400 bibliotecas públicas del país y las principales estaciones de TransMilenio, el sistema de transporte articulado masivo de la capital, que han puesto en marcha esta jornada llamada "Gabolectura".
Por su parte, el Instituto Distrital de las Artes de Bogotá y Transmilenio también pusieron en marcha una iniciativa por el Día del Libro y distribuyeron unos 8.000 ejemplares en portales de TransMilenio.
Al mismo tiempo en Aracataca, el pueblo del caribe colombiano que vio nacer a García Márquez hace 87 años, la ministra de Educación, María Fernanda Ocampo, presentó el programa "Gabo vive en la escuela", que consistirá en la entrega de 12.654 audiolibros del Nobel a 4.218 escuelas para niños con necesidades especiales.
Este material, basado en los libros del escritor colombiano "Doce cuentos peregrinos", "El amor en los tiempos del cólera" y "Cien años de soledad", llegará a las instituciones educativas entre junio y julio.
Ocampo y los niños de las escuelas de Aracataca también participaron en la lectura simultánea y los alumnos escribieron en cientos de mariposas amarillas de papel cómo quieren que sea su país en el futuro.
Este homenaje a través de la lectura sigue al realizado ayer en la Catedral Primada de Bogotá, una ceremonia cargada de solemnidad, música sacra y funcionarios, y al que acogió Ciudad de México el pasado lunes, en el que participaron miles de personas, incluidas la familia del Nobel, Santos y su colega mexicano, Enrique Peña Nieto. EFE