El famoso y deseado 69, pero no acostado, sino de pie...

Pocas posiciones sexuales tienen un éxito equiparable a la 69. El Kamasutra ha sabido guardar los mejores placeres para este número relacionado con el erotismo y misticismo, del que carecen otras posturas. Pero, ¿de qué se trata? Para las personas que han vivido debajo de la tierra todo este tiempo, el 69 consiste en imitar a los números que nombran esta postura. Uno se dirige su boca al sexo de su pareja y el otro queda en esa misma posición por evidente física. ¿Por qué tanto amor por esta forma de tener sexo? El escritor surrealista francés, Raymon Quereau, lo describió de manera excelente: “Uno más uno es 69: dos personas entrelazadas una sobre la otra, específicamente sobre su sexo”. Quizá una de las razones por las que esta posición es tan popular es porque ambas partes están en igualdad de situaciones, ambos disfrutan lo mismo y nadie está sometido al otro, ¿lo mejor? Los papeles se pueden revertir de manera indistinta. Pero hay más, algunas variantes descartan estar acostado, lo de hoy es desafiar a la gravedad y levantarse de la cama: Él tiene que cargar a ella de la cintura, mientras él le hace sexo oral y ella también. Desistimos de colocar la imagen explicativa para no herir la susceptibilidad de las mentes puritanas e impolutas.