¿Has tenido herpes?
Por: Redacción -
Una leve comezón o ardor en los labios pueden ser indicativos de que sufres de herpes.
El herpes labial es producido por el herpes virus simple tipo I. Es un tipo de herpes que se transmite por contacto con la piel y tiene cada vez un grado más alto de infección entre la población joven.
Además, aunque parezca increíble, se puede producir por estrés, exposición al sol o al frío y por inmunodepresión.
Los dermatólogos aseguran que la primera infección es la más fuerte y dolorosa. Suele estar precedida por síntomas que se asemejan a muchas enfermedades infecciosas: fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, agotamiento, falta de ganas de comer, hinchazón de los ganglios linfáticos. Este tipo de síntomas se suelen dar entre los 2 y 20 días después de producirse la infección.
Posteriormente el herpes labial produce los primeros síntomas visibles: después de un periodo de picor, dolor o sensación de ardor, se forman granos que se transforman en ampollas y estas, a su vez, revientan y producen costras que suelen sanar sin dejar ninguna cicatriz en una semana o semana y media .
En los peores momentos de la enfermedad, cuando las heridas están abiertas, la enfermedad puede contagiarse a otras partes del cuerpo. Cuando se transmite hacia los ojos resulta muy peligroso porque puede producir ceguera.
Prevención y tratamiento
La prevención a esta enfermedad es muy difícil porque el contagio se puede producir sin que el transmisor manifieste signos visibles de la enfermedad. A pesar de esto, el contagio es más fácil cuando existan ampollas o heridas, en cuyo caso se debe evitar.
La prevención del herpes no siempre es posible, pero pueden adoptarse algunas medidas para minimizar los brotes. En este sentido, es importante reducir las situaciones de estrés para evitar reapariciones, así como lavarse frecuentemente las manos durante una exacerbación de la infección, ya que una higiene adecuada puede eliminar el riesgo de propagar la infección hacia otras áreas del cuerpo como, por ejemplo, los ojos.
En el caso del herpes labial, es recomendable el uso de pantallas solares con filtros de adecuada graduación para evitar los efectos de los rayos ultravioleta durante los meses de verano.
Es muy importante la visita al médico, si se presumen síntomas de esta enfermedad para que haga el diagnóstico apropiado.