La mujer con talla de brassiere ‘O’
La actriz porno Elizabeth Starr dice que sus implantes, ahora prohibidos, podrían matarla.
Tomado de: Semana
Hace 15 años, la actriz de películas porno Elizabeth Starr decidió operarse para avanzar en su carrera. Para ello, se hizo una peligrosa cirugía consistente en implantarse un material ilegal conocido como polipropileno el cual ahora, afirma, podría acabar con su vida.
La mujer de 43 años luce una talla de brassiere 'O'. Desde la cirugía inicial, ha contado con otros 63 procedimientos correctivos consecuencia de las complicaciones.
Los médicos le recomiendan que se haga una doble mastectomía con el fin de evitar posibles coágulos de sangre e infecciones, pero luego de lo que ha pasado, Starr le dijo a Barcroft Media que no considera la posibilidad de pasar por un quirófano de nuevo.
La mujer asegura que extirparse ambas glándulas mamarias no es una opción. "Después de 63 procedimientos en mi seno derecho, luchar para salvarlo y mantener mi carrera… sinceramente, no creo que pueda. La mastectomía se llevaría mi vida y no sé qué más hacer”, aseguró.
"En aquel entonces, yo tenía una familia que mantener y sabía que tener senos más grandes mejoraría mi futuro profesional", dijo la madre de dos hijos al Daily Mail.
"Ahora vivo el día a día de preocupándome de que me den infecciones o coágulos. (Los implantes) han arruinado mi vida", aseguró.
Además, Starr explicó al diario The Sun que "hay mucho tejido cicatricial en mis pechos que está afectando el flujo de sangre al resto de mi cuerpo y podría causar un coágulo fatal".
"Advertencia"
Los implantes de polipropileno nacieron en los años cuarenta gracias al doctor Gerald W. Johnson con el fin de producir senos de tamaños extremos, casi caricaturescos. Este material favorece la producción de fluidos y su absorción posterior, lo que hace que la glándula se expanda continuamente después de la cirugía.
A pesar del peligro aparente y las complicaciones frecuentes, este tipo de implante mamario era popular entre las actrices de cine adulto. Sin embargo, estuvieron disponibles antes de que la Administración de Alimentos y Drogas (FDA, por sus siglas en inglés) los retirara del mercado en 1999. También están prohibidos en la Unión Europea.
"Es difícil cuando has sido víctima de algo y, aún más, si se elige un camino en la vida en el que la gente te ve con desprecio y piensa: ‘se lo merecía’", dijo Starr. “Pero yo no le deseo esto a nadie y espero que mi historia sirva de advertencia".
Hace 15 años, la actriz de películas porno Elizabeth Starr decidió operarse para avanzar en su carrera. Para ello, se hizo una peligrosa cirugía consistente en implantarse un material ilegal conocido como polipropileno el cual ahora, afirma, podría acabar con su vida.
La mujer de 43 años luce una talla de brassiere 'O'. Desde la cirugía inicial, ha contado con otros 63 procedimientos correctivos consecuencia de las complicaciones.
Los médicos le recomiendan que se haga una doble mastectomía con el fin de evitar posibles coágulos de sangre e infecciones, pero luego de lo que ha pasado, Starr le dijo a Barcroft Media que no considera la posibilidad de pasar por un quirófano de nuevo.
La mujer asegura que extirparse ambas glándulas mamarias no es una opción. "Después de 63 procedimientos en mi seno derecho, luchar para salvarlo y mantener mi carrera… sinceramente, no creo que pueda. La mastectomía se llevaría mi vida y no sé qué más hacer”, aseguró.
"En aquel entonces, yo tenía una familia que mantener y sabía que tener senos más grandes mejoraría mi futuro profesional", dijo la madre de dos hijos al Daily Mail.
"Ahora vivo el día a día de preocupándome de que me den infecciones o coágulos. (Los implantes) han arruinado mi vida", aseguró.
Además, Starr explicó al diario The Sun que "hay mucho tejido cicatricial en mis pechos que está afectando el flujo de sangre al resto de mi cuerpo y podría causar un coágulo fatal".
"Advertencia"
Los implantes de polipropileno nacieron en los años cuarenta gracias al doctor Gerald W. Johnson con el fin de producir senos de tamaños extremos, casi caricaturescos. Este material favorece la producción de fluidos y su absorción posterior, lo que hace que la glándula se expanda continuamente después de la cirugía.
A pesar del peligro aparente y las complicaciones frecuentes, este tipo de implante mamario era popular entre las actrices de cine adulto. Sin embargo, estuvieron disponibles antes de que la Administración de Alimentos y Drogas (FDA, por sus siglas en inglés) los retirara del mercado en 1999. También están prohibidos en la Unión Europea.
"Es difícil cuando has sido víctima de algo y, aún más, si se elige un camino en la vida en el que la gente te ve con desprecio y piensa: ‘se lo merecía’", dijo Starr. “Pero yo no le deseo esto a nadie y espero que mi historia sirva de advertencia".