Propiedades curativas de la chía
Es importante observar que 100 gramos de semilla de chía aportan al organismo 23% de proteínas (fundamentales para el desarrollo de las células y para la síntesis de enzimas), 39% de ácidos grasos esenciales y 35% de fibras; estas últimas necesarias, ya que ayudan a controlar los niveles de azúcar en la sangre, el colesterol y los problemas cardiacos...
Igualmente, esta semilla es rica en antioxidantes y vitaminas del grupo B y E y, en cuanto a los minerales, contiene calcio, fósforo, potasio, cobre y zinc, entre otros.
Sin embargo, lo más interesante de las semillas de chía es que son ricas en ácido graso omega-3 alfalinoléico (el doble del omega 3 que los pescados), puesto que la presencia de esta sustancia es muy escasa dentro del mundo vegetal. En este sentido, la cantidad de omega-3 de las semillas de chía es superior a la del salmón; una cucharada de semillas de chía contiene más calcio que un vaso de leche.
Propiedades curativas
El omega 3, abundante en la semilla de chía, tiene una serie de propiedades benéficas para el organismo como:
- Controla la tensión arterial.
- Reduce el colesterol malo y aumenta el bueno.
- Disminuye hasta en un 45% el nivel de los triglicéridos (si se consume de entre 3 a 4 gramos de omega-3 diarios).
- Protege al sistema nervioso (depresión) e inmune.
- Ayuda al sano desarrollo del embarazo y al crecimiento de los niños: durante la gestación, es aconsejable que las mujeres consuman como mínimo 100 miligramos de este ácido graso esencial por día, ya que evita alteraciones por carencia de este.
- Disminuye el riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares.