La Cooperativa de Servicios Múltiples de Puerto Armuelles (COOSEMUPAR) ha sido liquidada por el gobierno. Desde finales del 2008, no se cultiva nada en las 12 fincas bananeras. La intención del gobierno ahora es otro experimento: convertirla en empresa mixta.
El llamado oro verde que hizo progresar al distrito del Barú está afectado por plagas, casi 3,000 trabajadores ya no reciben salarios y la pobreza galopa ahora en Puerto Armuelles.
Las deudas y las facturas se acumulan. Sólo al Banco Nacional y al Seguro Social se le deben 40 millones de dólares. Los sindicalistas metidos a empresarios no lograron sacar a flote a la empresa que por décadas explotó la transnacional Chiquita Brands. El subsidio periódico del Estado les permitió muchas veces pagar la planilla, pero no había fondos para comprar fertilizantes, maquinarias y otros insumos para desarrollar las labores de producción.
Las negociaciones con compañías serias como Del Monte para que se hicieran cargo de las plantaciones no prosperaron. Los ejecutivos se asustaron por el ambiente existente en el área; luego otra compañía italiana presentó una oferta, pero no llenó las expectativas del actual gobierno.
Los cuentos de sirena de una gran refinería que sería instalada en Puerto Armuelles se derrumbaron como castillos de arena. Casi nulo también ha sido la declaratoria para establecer una Zona Libre en Barú.
En medio de ese panorama sombrío se diluye la esperanza de la población de Puerto Armuelles, que añora los viejos tiempos donde el otro verde les hizo vivir mejores épocas.