El vicepresidente Juan Carlos Varela criticó ayer a la dirigencia opositora por no atreverse a poner el pecho y no dar la cara en las protestas y que en su lugar prefiera escudarse tras humildes manifestantes que con engaños son incitados a cerrar calles a base de desinformación.
Unas mujeres ng�bes interceptaron ayer a Varela, tras acudir a un hotel a la presentación del informe del PNUD sobre desarrollo humano para increparlo por el acuerdo suscrito con el cacique Rogelio Moreno, al que no reconocen como tal. Las mujeres reclamaron al vicepresidente que el acuerdo es ilegal, porque no estaban los verdaderos representantes de la comarca.
Luego Varela dijo a los medios que "en Panamá se necesita una oposición responsable, que no se esconda y que deje de financiar protestas", recalcó.
Advirtió que se está jugando a la política y haciendo campaña con la gente más humilde de este país. "Lo que molesta es que van a usar a los indígenas ng�bes y buglés en esto (las protestas contra la minería)".
Recordó que, cuando fue oposición en los años de la dictadura militar, él mismo salía a la calle a las protestas.
"Nosotros luchamos contra una dictadura de 21 años, que secuestró, exilió y encarceló, no teníamos miedo, nosotros dábamos la cara, pero aquí son unos cobardes, se ponen a estar financiando, no hacen una oposición responsable", destacó.
Varela manifestó que, en todos los meses de gobierno, la oposición no ha hablado para presentar una propuesta que mejore los proyectos del gobierno, por el contrario, "han armado escándalos" cada vez que tienen la oportunidad.
Varela dijo que no se iba a meter en los problemas internos de los indígenas.
Mientras, el ministro de la Presidencia, Demetrio Papadimitriu, sostuvo que no sabe qué más pueden hacer, si ya el gobierno se comprometió a no explotar ninguna mina dentro de las comarcas.
Papadimitriu dijo que, con esa decisión, alrededor de siete empresas de Estados Unidos, Brasil y Europa desistieron de sus intenciones de explotar Cerro Colorado.