Una explosión se produjo en el reactor número 2 de la central nuclear de Fukushima, en el noreste de Japón, tras el terremoto del viernes.
La deflagración reventó parte del contenedor primario del núcleo y provocó una fuga de una cantidad indeterminada de material radiactivo, según la Agencia de Seguridad Nuclear.
La agencia Kyodo señaló que los niveles de radiación "superaron el límite legal" tras la explosión hasta llegar durante un instante a los 8,127 microsievert, ocho veces por encima del tope recomendado para la salud.
El estallido ocurrió a las 6.10 hora de Japón, poco después de que el Gobierno admitiera que el reactor continuaba inestable.
Los operarios de la planta trabajan para inyectar agua salada en su contenedor secundario en un intento de enfriar el núcleo e impedir una fusión que emita radiactividad al exterior, pero el reactor casi siempre se mantuvo inestable.
Si el núcleo comienza a fundirse, provocará una situación de emergencia por fuga de radiación.
El reactor número 2 de Fukushima sufrió ayer un fallo en una de sus diez válvulas que afectó al sistema de refrigeración, algo similar a lo ocurrido antes de que explotaran los reactores 1 y 3 de la misma central después del terremoto de 9 grados de magnitud del viernes.
VICTIMAS.
Al menos 1,897 personas murieron y 3,002 se encuentran desaparecidas a causa del terremoto de 9 grados en la escala de Richter del pasado viernes y el "tsunami" posterior, según el último recuento policial.
Sin embargo, se cree que la cifra final de víctimas puede ser mucho mayor, puesto que las autoridades de los municipios afectados han facilitado datos de varios miles de desaparecidos o fallecidos.
La agencia local Kyodo informó de 5,000 víctimas entre muertos y desaparecidos, pero estos datos no fueron confirmados por el Gobierno, que contabiliza unos 15,000 rescatados.
Las autoridades provinciales de Miyagi, una de las zonas más afectadas, apuntan a unas 9,500 personas sin localizar solo en el pueblo de Minamisanriku, lo que supone la mitad de su población, aunque no se excluye que se refugiaran en pueblos cercanos.
En la costa de esa misma provincia se han hallado unos 2,000 cadáveres, y otros 200 o 300 cuerpos fueron localizados en su capital, Sendai, según Kyodo.