El defensor del Pueblo, Ricardo Vargas, advirtió ayer a las autoridades gubernamentales que el acceso al agua potable es un derecho humano, por lo que instó a ejecutar planes de acción inmediata que de manera definitiva resuelvan la carencia del vital líquido.
La advertencia de Vargas surge ante las constantes manifestaciones ciudadanas por la falta de agua potable en las comunidades apartadas.
Vargas que sugirió que es preciso adoptar estrategias y planes nacionales que permitan "aproximarse de forma rápida y eficaz a la realización total del derecho a disponer del agua".
Para Vargas, es lamentable que Panamá no cuente con un plan de acción que brinde respuesta a situaciones de emergencia respecto a la carencia de agua potable y saneamiento en áreas rurales y urbanas marginales, situación preocupante como país integrante de la Organización de las Naciones Unidas.