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El acuerdo entre el gobierno y los transportistas para aumentar el pasaje incluye una serie de obligaciones por parte de los conductores y dueños de autobuses, entre ellas:
En un mes deben asistir a seminarios de capacitación para los conductores para manejo ordenado, relaciones humanas y atención al usuario; utilizar camisas o suéter con cuello y mangas; uso de zapatos y medias, aseo personal (incluyendo corte de barba y cabello); uso de carnet de identificación, eliminación de calcomanías obscenas, aseo diario del autobús, barra de asidero segura para los pasajeros que viajen de pie, colocar en un lugar visible el número de teléfono para recibir denuncias de los usuarios.
Demarcar el límite para pasajeros que van de pie con una línea amarilla ubicadas entre las dos barras del primer asiento delantero.
En el parabrisas sólo se permitirá la identificación de la ruta, eliminación de tocacintas, instalación de silenciadores, eliminar nombres que hagan alusión a muerte, satanismo dentro y fuera de los autobuses.
Los conductores serán sometidos sin previo aviso a exámenes para detectar droga y estado de embriaguez, conducir con la puerta del vehículo cerrada.
Dentro de dos meses, los conductores deberán ser uniformados.
Mientras que en seis meses deben cumplir con reparar la tapicería y pisos de sus buses.
En un año deben pintar el autobús del color que identifique su ruta, actualizar su certificado de operación, reparar las unidades en malas condiciones, retirar del servicio activo los buses que no reúnen las condiciones mecánicas, contratar pólizas de seguro.
Además el usuario tendrá el derecho de no pagar la tarifa si el conductor no cubre la ruta en su totalidad. |
